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El sueño está más intacto que nunca. La ilusión de ir a Tokio late con fuerza en los corazones de los jugadores y del cuerpo técnico. La selección Colombia sub-23 comienza hoy el tramo final del Torneo Preolímpico de Fútbol en Bucaramanga. Para llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 hay que superar a rivales fuertes como Brasil, Argentina y Uruguay. Los dirigidos por Arturo Reyes comienzan este nuevo reto ante Brasil, el súper favorito del campeonato y que en la primera fase terminó con puntaje perfecto (12 puntos de 12 posibles).

Colombia sabe del poderío de los brasileños, pero no hay temor. Hoy, a partir de las 8:30 de la noche, cuando ruede el balón en el estadio Alfonso López, esperan pelear de tú a tú, sin miedo y dejando hasta la última gota de sudor en el terreno de juego.

Colombia, que logró una sufrida clasificación en el juego ante Chile (empató 0-0), le apostará al equipo que ha venido actuando en el torneo. El capitán Eduard Atuesta, que se perdió el duelo ante los australes por acumulación de amarilla, regresará a la zona medular. Jorge Carrascal volverá a ser el encargado de guiar al combinado colombiano, el cartagenero es la principal esperanza de Colombia para hacerle daño a Brasil.

'Estamos muy fuertes mentalmente, motivados para afrontar esa última fase del torneo. Somos los locales y queremos clasificar a los Juegos Olímpico. Este es un equipo comprometido y le queremos regalar esa alegría a todo este país que nos ha apoyado. Sabemos que no será fácil, pero vamos a luchar con todo hasta el final', sostuvo el atacante Johan Carbonero.

El técnico Arturo Reyes estaría estudiando la posibilidad de volver a utilizar a Luis ‘El Chino’ Sandoval como hombre en el ataque en lugar de Ricardo ‘El Caballo’ Márquez. El delantero del Junior está ilusionado y espera empezar a mostrar su capacidad goleadora en el cuadrangular final.

'Sabemos que a los delanteros no ha costado, pero sé que los goles van a llegar. En Bucaramanga vamos a poner todo de nuestra parte y queremos ganarle a Brasil de entrada para llenarnos de confianza', expresó con entusiasmo el atacante atlanticense.

Colombia está con la fe intacta y espera dar el golpe ante Brasil para seguir soñando con ir a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.