Un buen representante, ofrecer características físicas y técnicas ajustadas a las necesidades de un quinteto, ser del agrado de un entrenador e incluso hasta una dosis de suerte. Son muchos los factores que se hacen relevantes para la llegada de un basquetbolista a la NBA, un mundo aún esquivo para los jugadores colombianos. Solo el bolivarense Álvaro Teherán, fallecido el pasado 4 de mayo a los 54 calendarios tras batallar contra un cáncer, ha sido el único criollo en disputar al menos unos juegos de pretemporada con un equipo de la NBA. El ´Gigante de María La Baja´ fue seleccionado por los Sixers de Filadelfia, pero su debut en la temporada regular jamás llegó. Juan Diego Tello, en 2008, y Braian Angola, una década después, estuvieron en el draft, pero no fueron seleccionados por ningún equipo. EL HERALDO consultó voces de expertos para escuchar sus opiniones sobre ¿por qué no ha llegado un basquetbolista colombiano a la NBA?
Guillermo Moreno es el entrenador de la selección Colombia de mayores en la rama masculina junto al cartagenero Tomás Díaz. Para el caleño, además de cumplir con un talento puro, el jugador debe ser fuerte mentalmente. 'En el deporte lo mental va primero que el físico. Si yo creo en mí, nadie va a poder decirme algo contrario a lo que yo crea. Partiendo desde este punto, creo que la preparación mental, lo psicológico, es vital. El jugador debe también tener la palabra ganas en su mente. Ganas de quedar, una cosa es querer quedar, otra son las ganas de quedar. Esa es una palabra que mucha gente no maneja. Yo puedo estar en un equipo, pero qué tantas ganas tengo yo de estar ahí', expresa el experimentado timonel de 68 años.