La discusión quedó atrás. Después del tira y jala entre el sindicato de peloteros y los dueños de los equipos por los salarios y la cantidad de juegos en medio de la pandemia del coronavirus, las Grandes Ligas reanudaron actividades deportivas ayer de cara a la atípica temporada 2020, que comenzará el 23 o 24 de julio y que solo comprenderá 60 juegos de campaña regular, entre muchos otros cambios por la emergencia sanitaria.
En esta nueva aventura entre bates y manillas habrá siete colombianos con puesto garantizado: el lanzador José Quintana, con los Cachorros de Chicago; el antesalista Giovanny Urshela, con los Yanquis de Nueva York; el receptor Jorge Alfaro y el jardinero Harold Ramírez, con los Marlins de Miami; Óscar Mercado, con los Indios de Cleveland; el utility Dónovan Solano, con los Gigantes de San Francisco; y el pitcher Julio Teherán, con su nuevo equipo, los Angelinos de Los Ángeles.
Quintana encarará su novena campaña consecutiva en Las Mayores, la novena teniendo como casa a Chicago (jugó cinco y media con los Medias Blancas y dos y media con los Cachorros). Ante una temporada reducida le quedará imposible superar las 13 victorias, techo que logró en 2016, 2018 y 2019.
Urshela, sensación de la encopetada novena de la Gran Manzana durante 2019, aspira a repetir sus joyas defensivas en la esquina caliente y sus batazos oportunos y poderosos que lo convirtieron en el colombiano con mayor número número de jonrones en una campaña en la Gran Carpa (21).
Alfaro y Ramírez buscarán consolidarse aún más en los Marlins, evitar que el equipo vuelva a ser último en la División Este de la Liga Nacional (con 105 derrotas y solo 57 triunfos) y elevar sus numeritos individuales.
Mercado va por más en su segundo año como grandesligas. En 115 juegos con los Indios de Cleveland dio muestras de su enorme talento a la hora de pararse en el plato y en su función como guardabosques. Conectó 118 imparables (entre los cuales 15 fueron vuelacercas, 3 triples y 25 dobles), anotó 70 carreras e impulsó 54. Además se robó 15 bases. El novato del ‘la Tribu’ se lució.
Solano jugará su séptima campaña en el mejor béisbol del mundo, la segunda con los Gigantes de San Francisco. El barranquillero, primer colombiano que jugó con los Yanquis en Las Mayores (2016), actuó en 81 compromisos y cerró con un promedio ofensivo de 330., el más alto de su carrera.
Teherán completará su décimo año en Grandes Ligas, el primero fuera de los Bravos de Atlanta. El lanzador cartagenero, con 33 aperturas, 10 triunfos, 11 derrotas y una efectividad de 3.81, tratará de empezar a cosechar más éxitos fuera de la que fue su casa durante nueve temporadas.
Su paso de la Liga Nacional a la Liga Americana supone enfrentar a hombres de más poder ofensivo, aunque en medio de esta temporada atípica le verá las caras a muchos de los bateadores que solía enfrentar en el Viejo Circuito.
Los que aspiran a quedarse en la élite
Quintana, Teherán, Urshela, Alfaro, Ramírez, Mercado y Solano tienen su cupo garantizado en el roster de sus equipos, pero hay otros peloteros colombianos que los acompañarán en los entrenamientos precompetitivos: Meibrys Viloria (receptor de Reales de Kansas City), Ronaldo Hernández (receptor de Rays de Tampa Bay), Adrián Sánchez (infielder de los Nacionales de Washington), Tayron Guerrero (pitcher relevista que pasó de Marlins a Medias Blancas de Chicago), Jeter Downs (campocorto de Medias Rojas de Boston), Luis Patiño (lanzador de los Padres de San Diego) y Dilson Herrera (segunda base de los Orioles de Baltimore).
Varios de ellos tiene contratos de liga menor y fueron invitados a los campos de entrenamiento. Probablemente sean tenidos en cuanta durante la campaña si se presenta alguna situación de suspensión, lesión o bajo rendimiento en el equipo de arriba. Giovanny Urshela, por ejemplo, tenía contrato de Liga menor el año pasado, pero terminó ascendiendo al roster principal por la lesión del tercera base dominicano Miguel Andujar.
Urshela no solo suplió la ausencia de Andujar momentáneamente, por su buena actuación el cartagenero se quedó con el puesto.
Todo este grupo de besibolistas criollos, que aspira a contar con una oportunidad en la élite peloteril, hace que la afición de este deporte en el país se emocione más con las Grandes Ligas. Aunque ya hay siete motivos para entusiasmarse.
Las ligas menores cancelan su temporada 2020
Las ligas menores de béisbol cancelaron su temporada debido a la pandemia del coronavirus y más de la mitad de los 160 equipos corren el riesgo de afrontar serios problemas sin ayuda del Gobierno o sin inyecciones de capital privado, afirmó Pat O’Conner, presidente de la Asociación Nacional de Ligas de Béisbol Profesional.
El responsable del órgano rector de las ligas menores estimó que el 85-90% de los ingresos están relacionados con la venta de boletos, concesiones o publicidad en los campos de juego. 'Somos un negocio de aficionados en las gradas. No tenemos ingresos por televisión nacional'.
Las ligas menores atrajeron a 41,5 millones de aficionados el año pasado, con un promedio de 4.044 aficionados por partido. (EFE)