No se puede prescindir tanto tiempo de su olfato goleador. Radamel Falcao García demostró que su poder anotador se mantiene intacto y convirtió en el minuto 90 el gol que le permitió a Colombia empatar 2-2 ante Chile y rescatar un punto de oro, anoche en el estadio Nacional, de Santiago, en la segunda fecha de la Eliminatoria Sudamericana rumbo a Catar-2022.
El combinado patrio comenzó ganando (a los 6 minutos) con un tanto de Jefferson Lerma, el mejor jugador del partido, pero los anfitriones le dieron vuelta al marcador con anotaciones de Arturo Vidal, de penalti (37), y Alexis Sánchez (40).
Cuando el tiempo se extinguía, ‘el Tigre’ salvó la patria al cazar una pelota suelta y desviarla hacia la red.
El primer tiempo comenzó favorable para Colombia. El equipo lucía ordenado, sereno, serio, estructurado, sólido. Apenas en el primer minuto de juego, con una proyección por izquierda de Johan Mojica que Duván Zapata no pudo cabecear de manera certera, se aproximó con peligro a la portería local.
Había un bloque para esperar con seguridad y agresividad y para responder de forma veloz e intimidante. En una de esas recuperaciones sorpresivas protagonizadas por Stefan Medina y una inmediata proyección por la banda, se presentó el primer grito de gol en el silencio del estadio Nacional, de Santiago. Centro perfecto del lateral paisa y cabezazo efectivo de Jefferson Lerma.
El gol fue una de las destacadas intervenciones del volante del Bournemouth, que se multiplicaba para ser protagonista en las dos áreas. Contenía y generaba con una admirable dinámica.
En una acción partió desde territorio colombiano, atravesó el mediocampo, se quitó de encima la marca de Vidal y sacó un riflazo que el guardameta local mandó al tiro de esquina con enorme exigencia.
De la mano de un Lerma gigante, Colombia parecía destinada al triunfo, todo funcionaba sin mayores problemas hasta que Stefan Medina se lesionó.
Hubo necesidad de sustituirlo y a partir de ahí se empezó a desmoronar el conjunto tricolor. Carlos Queiroz decidió mandar a la cancha al volante Steven Alzate y ubicar a Cuadrado como lateral derecho. La Selección perdió la correcta labor de su marcador natural y el buen trabajo de Cuadrado como interior.
Chile igualó en la única jugada en la que Lerma falló. El volante fue imprudente intentando rechazar un rebote suelto en un córner. Vidal se le anticipó y el mediocampista visitante terminó pateando a la estrella chilena. El árbitro ignoró la jugada, pero el VAR le dio avisó, la revisó y la sancionó.
Vidal ejecutó con potencia y ubicación, inatajable para Vargas.
En medio del enredo y desacomodo de los nuestros, Chile se encontró con el segundo tanto. Cuadrado erro su intento de rechazo en una bola suelta, le quedó a Alexis Sánchez, que llegó primero que Camilo Vargas, y convirtió el 2-1.
Colombia extravió su guión y a su mejores hombres ofensivos. James, Muriel y Zapata brillaban por su ausencia. Así, sin ideas e incómodos, se cerró la persiana de la etapa inicial.
Ya en el período complementario, Chile comenzó a jugar con el desespero y necesidad del adversario. Los dirigidos por Reinaldo Rueda se sintieron cómodos con la ventaja y las circunstancias. Se atrincheraron atrás y controlaron a la Selección, que se dedicó a tratar de explotar el juego aéreo. Pocas jugadas hilvanadas y pensadas, había más músculo que ideas. Se echaba de menos a jugadores con habilidad y encare que ingresaran a brindar claridad y desequilibrio.
Queiroz apeló a Alfredo Morelos, un delantero de área natural, en lugar de un apagado Muriel, y no consiguió algo distinto a batallar.
Forcejos, garra, lucha, empujones. De una manera atropellada, Colombia buscaba su tabla de salvación para no sucumbir en Santiago. Después mandó por fin al goleador Radamel Falcao García en lugar de Wilmar Barrios. Toda la carne en el asador.
Colombia terminó caótico, pero sin ahorrar esfuerzo, sin perder el deseo de victoria. Parecía que se marchaba con las manos vacías y sin descifrar la manera de abrir la caja fuerte de Rueda, pero ‘el Tigre’ ratificó que su experimentado olfato goleador hay que tenerlo en cuenta siempre y salvó la patria.