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Sin lugar a dudas, Roger Martínez fue uno de los mejores jugadores de Colombia en el empate 1-1 frente Bolivia, en el estadio Hernando Siles de La Paz.

El atacante, que convirtió el tanto del combinado patrio, considera que fue un 'juego difícil' el que disputaron este jueves en los 3.640 metros de altura de la capital boliviana.

'Fue un juego difícil, teníamos los tres puntos asegurados y Bolivia nos empató. Perdimos dos puntos y ganamos uno, que es algo también importante', comentó.

'El rival también hizo méritos para empatar, con una jugada fuera del área igualaron. No creo que sea un mal resultado el que logramos. Ahora hay que seguir', agregó.

Sobre lo que significó jugar con esas complicadas condiciones, el atacante señaló que 'por el país y la Selección se debe sacar el 200 o 300%', aunque el escenario sea adverso.

'Para nadie es un secreto que jugar en la altura es complicado, pero por el país y la Selección uno debe sacar el 200 o 300% en cada juego. Sacamos un punto importante y ya estamos pensando en lo que viene', manifestó.

'Yo pienso que hicimos un buen partido. Hasta el gol de ellos estábamos concentrados y manejando bien al rival. Ya hay que dejar esto atrás y pensar en lo que viene, que será complicado', añadió.

Sobre su gol puntualizó que 'fue una jugada que estuve buscando todo el tiempo. Se me dio ahí, y una vez que vi el espacio, le di al arco. Muy agradecido con Dios y mis compañeros por el gol'.

Por otro lado, comentó que se van con un 'sabor agridulce' porque tenían controlado el partido. 'El profe (Reinaldo Rueda) nos dijo siempre que aguantáramos y que cuando tuviéramos la chance arrancáramos. Estoy muy contento por el gol. Se va uno con un sabor agridulce porque lo teníamos controlado, pero igual ganamos un punto que es importante para lo que viene', concluyó.