Los Caimanes no son fáciles de domar. Con un gran trabajo monticular del lanzador dominicano Eduar López y una ofensiva con peligrosos dientes, mordieron su primera victoria ante Vaqueros de Montería (6-3) en la final de la Liga Profesional Colombiana de Béisbol, este domingo en el estadio Édgar Rentería.
La novena de Barranquilla, campeona defensora, se repuso de la derrota en el primer choque y empató la serie por el título 1-1.
Un triple de Che Cheng Tsong le dio la bienvenida al abridor cubano-estadounidense Carlos Sierra. El taiwanés despachó un batazo hacia el jardín derecho y se ancló en la antesala. Desde ahí lo remolcó Carlos Arroyo con un sencillo hacia el bosque diestro.
El asiático, prospecto de los Piratas de Pittsburgh, anotó la primera carrera del juego y posteriormente, en la parte baja del segundo acto, protagonizó una joya de pitcheo en el campo corto para frustrar la amenaza de empate.
Eduar López, abridor de Caimanes, impuso una dictadura desde la lomita y los peloteros de Vaqueros desfilaban abanicando la brisa o viendo morir sus batazos en los guantes reptiles.
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