Los jugadores del Unión, quienes fueron entrevistados en el campo mientras ocurrían los hechos, lamentaron los hechos de violencia que se presentaron en el estadio Sierra Nevada entre las barras del Junior y las azulgranas, y que dañaron un clásico parejo y que pasaba por su mejor momento, luego de las anotaciones de ambos equipos en el arranque de la segunda parte.
Los jugadores mostraron su preocupación y rechazaron este tipo de actos vandálicos que afectan el espectáculo y ahuyentan a las familias de los estadios de fútbol.
'Ya estamos cansados de esto, siempre es lo mismo. Me preocupa la familia, que está en la tribuna. Mi mamá sufre de los nervios y este tipo de cosas la afectan mucho, porque se preocupa por mí. Nosotros somos costeños y no nos podemos estar matando entre nosotros', afirmó el defensor del Unión Jermein Peña.
'Uno qué puede hacer ahí, uno los calma y no hacen caso. Ellos son así. No hay palabras para esto. Es increíble. Nos ensucian a nosotros, a la gente que viene a ver el espectáculo', agregó el delantero Ethan González.
El lateral Brayan Correa, por su parte, lamentó que este tipo de inconvenientes, muchos más sabiendo que días previos hubo un acuerdo de no agresión entre barras.
'No es lo debido, venimos a hacer el partido, estaba en paz, las hinchadas habían hecho un acuerdo, porque era un clásico, y lo dañan así', dijo Correa.
'Esto no puede suceder en el fútbol, porque la gente viene es a ver un espectáculo y se encuentran con esto tan feo. Pero bueno, hay que echar para adelante', concluyó.
Y así terminó el ‘Clásico Costeño’, dañado una vez más por los violentos, que decidieron ponerle fin al espectáculo del fútbol y ‘manchar’, una vez más, la pelota.
