Compartir:

El balón siempre al tres. Aunque el venezolano Heissler Guillent no tuvo la mejor de sus noches, su experiencia y la técnica al manejar el balón le dieron un plus a la ofensiva titánica. El base internacional fue indefensible en el cotejo con que el equipo barranquillero se coronó campeón por séptima vez seguida del baloncesto nacional.

'Me siento muy contento, el equipo viene trabajando para esto durante toda la temporada. Finalmente, nosotros logramos llegar desde las semifinales para aportar las últimas cosas que Titanes necesitaba. Este apenas es el primer objetivo, pero gracias a Dios ya lo alcanzamos', mencionó el venezolano.

Heissler quedó en la historia del club currambero al ser el jugador que encestó el triple de campeonato en la pasada campaña (2022-1), cuando los dirigidos por Tomás Díaz se medían ante Cafeteros de Armenia. En esta temporada, se encontró con un rival diferente en los Caribbean Storm de San Andrés, pero que los llevó la limite.

'Esperábamos una serie tan dura como esta, los dos primeros juegos fueron muestra de ello. El entrenador nos pidió que jugáramos en equipo y, de esa manera, alcanzamos lo esperado que era ganar', dijo Guillent.

Finalmente, el anotador del vecino país se mostró emocionado por el ambiente que se palpito en el coliseo Elías Chegwin, donde terminó destacando que fue algo que le dio un sabor especial a esta conquista.

'El año pasado disputamos toda la temporada fuera de casa y prácticamente sin público, aunque era una sola sede. Sin embargo, me siento muy feliz por alcanzar el objetivo delante toda esta gente', finalizó.