Atrás quedaron las caras largas. Luis Manuel Díaz ya no tiene el rostro adusto e incómodo que se le veía en sus primeros días en Inglaterra tras dejar atrás los oscuros y estresantes momentos del secuestro.
El progenitor del guajiro se ha convertido en una estrella que posa para fotos con los hinchas del Liverpool.
Atrás quedaron las caras largas. Luis Manuel Díaz ya no tiene el rostro adusto e incómodo que se le veía en sus primeros días en Inglaterra tras dejar atrás los oscuros y estresantes momentos del secuestro.