El deporte le sigue cambiando la cara a Barranquilla. El Palacio de Combates, antiguo coliseo Humberto Perea, es prueba de ello. Con un diseño bioclimático y acogedor, este escenario deportivo, uno de los más importantes en ‘la Arenosa’, albergará el voleibol en los Juegos Centroamericanos y del Caribe. Luego de que concluyan las justas, será la sede de las disciplinas de contacto y, además, será un espacio multifuncional para la práctica de otros deportes como el futsal, el baloncesto y el balonmano.
El 26 junio de 2016, con profunda melancolía, Barranquilla despedía a través del método de implosión, la deteriorada estructura del coliseo Humberto Perea. Con 50 kilos de explosivos ‘enterraron’ 55 años de historia.
A partir de allí los trabajos fueron incesantes, se realizó una excavación de 4 metros con 50 centímetros y pese a que la lluvia por momentos mermaba las actividades, 21 meses después de aquella detonación, la obra está a dos meses de ser entregada de manera oficial.
'Este es un escenario con unas dimensiones perfectas y que permite una temperatura agradable dentro del mismo, gracias a su diseño bioclimático. La superficie de competencia es de 44 metros de largo por 22 de ancho, lo cual permite que disciplinas como el voleibol, el basquetbol, el balonmano y el futsal se desarrollen con normalidad. Para los Juegos será exclusivamente para el voleibol', expresó Gonzalo Baute, secretario distrital de deportes.