'Tengo yo más cara de lesionado que James'. La expresión la lanzó más de un periodista que cubrió ayer el entrenamiento de la Selección Colombia en el polideportivo de la Universidad Autónoma del Caribe y observó detalladamente los trabajos de James Rodríguez.
El diez, que se unió a la convocatoria ayer en la mañana, entrenó con normalidad y a la par de sus compañeros.
El Bayern Múnich, equipo donde milita el colombiano, emitió un comunicado el pasado domingo manifestando que James no podía actuar, de ninguna manera, en el juego ante Venezuela y que habían decidido prestarlo con ese acuerdo.
Pero James hizo ayer futbol en espacio reducido y se le vio activo. Presionó, tocó corto, largo y hasta se atrevió a tirar un par de planchazos para recuperar el balón. No parece que tuviera algún problema físico. Hasta algunos de sus compañeros se lo hicieron saber.
'Ahora que tuve la oportunidad de entrenar con él, yo le decía: no tienes nada, estás como cuando estabas en Madrid. Él es un jugador diferente, que tiene mucha calidad y no se le nota que tuviera algún problema. El mero hecho de que James esté acá con nosotros es un plus. Es un jugador demasiado importante. La alegría que tiene James en el vestuario es vital para nosotros', apuntó Giovanni Moreno.
Luego de hacer fútbol en espacio reducido, James se acercó al médico Carlos Ulloa y dialogaron por espacio de 10 minutos. El volante cucuteño siempre lució sonriente, en ningún momento hizo trabajo diferenciado y estuvo atento a las indicaciones del técnico José Pékerman.
La mayoría se sorprendió con la actitud mostrada por James, quien parece no sufrir ninguna molestia. Sus compañeros lo siguen arropando y no dudan que su fútbol es vital en la Selección.
'Él es nuestro referente, es el jugador diferente, con muchas virtudes. Verlo así, con esa actitud con la que ha llegado, motiva. Es una pieza clave en la Selección y ojalá que se siga recuperando', manifestó el defensor barranquillero William Tesillo.
En la Selección, James luce feliz y eso lo refleja en cada paso queda cuando está entrenando. Llegó entre algodones, pero él luce como si nada y con ganas de aportar ese talento que lo ha caracterizado.
Tanto los jugadores como el técnico José Néstor Pékerman arropan al mediocampista. James llegó y parece no tener nada, pero la última palabra la tienen Pékerman y el Bayern.