La definición por tiros desde el punto penal de la semifinal de la Copa América entre Colombia y Argentina estuvo candente. No solo por las provocaciones marrulleras del arquero Emiliano Martínez a los cobradores de Colombia, también por la manera en que Lionel Messi le restregó a Yerry Mina, su excompañero en el Barcelona, el cobro fallido ante el guardameta gaucho.
Luego de que Martínez le atajó la ejecución a Mina, con quien tuvo dimes y diretes antes del cobro, Messi le gritó a la distancia, a todo pulmón y con su marcado acento argentino: '¡Bailá ahora, dale! ¡Bailá ahora, bailá!'.
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De una manera inusual, sin contemplaciones, ‘la Pulga’ se burló del infortunio del defensa colombiano junto a sus compañeros de selección.
