Pocos los conocen por su nombre, la mayoría lo llama El Serrucho Bolatti y a punta de ‘Serrucho’ le cortó el vuelo a las águilas doradas, que querían picotear el nido del Junior. Matías sorprendió a todos en el Metropolitano, su debut fue el soñado por todo futbolista y de su botín derecho sacó el as que tenía guardado: el gol.
Después de la anotación decidió mostrar lo que se había ensayado y lo que la hinchada había visto por las redes sociales. El argentino festejó con la champeta de moda y así clavó las esperanzas del Itagüí. En las tribunas la afición gozó y él ni se diga, fue el centro de atención de la noche, sin duda alguna su baile y su gol pagaron la boleta.
Bolatti dejó el jolgorio a un lado, habló con cautela de su debut exitoso y espera que sigan viniendo más goles para así poder festejar a punta de ‘serrucho’. 'Ojalá que podamos hacer más el festejo de El Serrucho, que vengan más goles para seguir bailando. La verdad que fue un lindo debut, sinceramente no me lo esperaba. El gol me pone muy feliz y espero seguir aportándole grandes cosas a este gran equipo', sostuvo el gaucho ayer con más calma.
La celebración era una promesa, por eso había que cumplirla. Asegura que le gusta la canción de Mr. Black, se sabe algunos apartes y lo del baile lo tiene claro. A pesar de que no le incomoda la champeta, afirma que lo suyo es la música argentina. 'Mis compañeros me pidieron que cuando hiciera un gol lo festejara así y bueno se dio, me acordé y lo festejé de esa manera. La canción la escucho bastante, no me la sé completa, eso sí el pase sí me lo aprendí. Me gusta mucho este ritmo, pero lo mío es el cuarteto y la cumbia', agrega en medio de risas.
Con respecto a su fútbol, cree ser un jugador que le gusta desprenderse rápido de la pelota, buscar siempre al compañero mejor ubicado y que el fútbol del equipo crezca con sus pases. Tiene claro que la competencia apenas comienza, pero está dispuesto a poner todo su empeño para que su evolución futbolística se siga notando. 'Me gusta jugar a uno o dos toques, no me gusta tener mucho la pelota, hacer un fútbol rápido, dinámico, suelo jugar de esa manera. Tratar de jugar rápido para producirle al equipo. Me gusta jugar más de doble 5, soltarme, tengo marca, pero me gusta más crear juego', aclaró el mediocampista argentino.
No es la primera vez que debuta marcando gol, cuando estuvo en Europa ya lo había hecho. Reconoce que antes de saltar a la cancha el pasado jueves estaba algo ansioso, quería que las cosas le salieran bien y al final no pudo ser mejor. Ahora lo que más anhela es seguir poniéndose al cien por ciento para demostrar que es un jugador que le puede aportar buenas cosas a la escuadra tiburona. 'En el 2012, cuando llegué a Grecia, el primer partido lo jugué de titular y también marqué un gol. Al igual que la gente, estaba ansioso, ellos me querían ver jugar y yo quería pisar la cancha; Miguel (El Zurdo) me conoce y sabe que yo estaba listo, él igual sabía en qué momento ponerme, es un hombre muy inteligente y sabía que en este partido podía darle una mano al equipo, por suerte pude entrar y ayudarlo', sentenció el volante.
Bolatti admira el fútbol de otros jugadores de su país. Cree que no es de hacer muchos goles, le gusta habilitar a los delanteros y asegura que con el paso del tiempo su fútbol ha crecido. 'Me gusta mucho como juega Gago, soy hincha de Boca Juniors, de Riquelme. A Gago lo admiro por la posición, lo miro para tratar de aprender de ellos, sueltan juego, siempre trato de tener la pelota. No llevo la cuenta de los goles, pero no soy de hacer muchos, he metido más pases que los que he hecho, en el último año he pisado más el área. El año pasado en Grecia hice 4 goles y en el Temperley no pude convertir. En mi juego he mejorado mucho eso, últimamente lo estoy haciendo y gracias a Dios he podido convertir', sentenció la nueva cara rojiblanca.
El volante argentino Matías Bolatti quiere seguir marcando goles con Junior para que el baile de El Serrucho no pase de moda y no solo se imponga en el estadio Metropolitano, sino en todos los escenarios de Colombia.