Miguel Ángel López ve injusta su salida del Junior de Barranquilla. El técnico argentino, que pasó ayer a primera hora por la sede Adelita de Char para despedirse de la plantilla, aseguró que su gestión iba bien encaminada, teniendo en cuenta que se habían alcanzado ciertos objetivos y se estaba realizando una campaña aceptable en la Liga Postobón I-2014. El Zurdo afirmó que respeta la decisión tomada por la junta directiva rojiblanca, pero no la comparte. 'He dado lo que podía, lo máximo, he puesto el alma como siempre, pero la decisión es de la directiva y la respeto. Hay cosas que uno puede considerar justas o no, y yo no considero justa mi salida', dijo.
Entre las cosas que destaca el estratega argentino es la aceptable campaña realizada el semestre anterior, la venta de un jugador como Luis Carlos Ruiz en un precio considerable, el debut de varios elementos de la cantera y la regular temporada que, según él, venía cumpliendo el equipo este año en la Liga Postobón I. Sin ningún temor, el Zurdo manifestó que, por encima de las críticas recibidas, deja un saldo positivo en el club.
'El año pasado sumamos 40 puntos y estuvimos arriba del 50% de eficacia. En este torneo estamos dentro de los ocho, tenemos 15 puntos de 30 disputados, un 50% de efectividad, lo que habla que si conseguíamos igual cantidad en la segunda vuelta estábamos clasificados y además tenemos un partido menos. Hemos hecho debutar jugadores, hicimos vender un jugador en 4 millones de dólares, entonces creo que dejo un saldo positivo y estos hechos así lo demuestran. Los objetivos no se logran al comienzo ni durante, sino al final', expresó.
El técnico argentino mantuvo su discurso sobre lo que le afectó al equipo la salida de un jugador importante como Luis Carlos Ruiz. Según el adiestrador, Junior venía realizando grandes actuaciones hasta que se fue el delantero samario. 'Nosotros veníamos de grandes actuaciones y al ser transferido Ruiz se desacomodó el equipo. Mientras estábamos esperando la puesta a punto de Toloza, un jugador en el que confío mucho, sucedieron estas tres derrotas que produjeron mi desvinculación de la institución', afirmó.
Por último, el argentino expresó que termina 'conforme' con su séptima etapa al frente del tiburón y agradece a la plantilla por toda la entrega y el profesionalismo mostrado.
'Estas son decisiones de la dirigencia y ellos sabrán por qué lo hacen. Yo solo digo que si estábamos acá para una cosa y la íbamos logrando, entonces considero que he cumplido', dijo. 'Me voy muy conforme y agradecido con el plantel, ya que siempre obtuve un respuesta altamente positiva de ellos, con bajones como estos tres partidos, pero tenemos un grupo ejemplar, como hace mucho tiempo no ha tenido esta institución', puntualizó.
A continuación, EL HERALDO hace un análisis de los puntos negativos que influyeron en la salida del Zurdo López del Junior de Barranquilla.
Mal manejo de grupo
El Zurdo López, quien se ha caracterizado por ser un técnico consentidor y que le sabe llegar al jugador, en esta oportunidad se le salió el grupo de las manos. El reencauche de un jugador polémico como Édinson Toloza, y algunas decisiones de carácter táctico, terminaron de romper las relaciones dentro del plantel. Famosa fue su discusión con el delantero Martín Arzuaga en un entrenamiento en Cartagena, por haber intentado poner a Toloza en el equipo titular cuando este apenas acababa de llegar al grupo. En esos mismos días, el delantero nariñense había sido protagonista de una polémica por haberse ido de fiesta en carnavales junto a otros integrantes del plantel cuando apenas acababa de arribar a la ciudad. EL HERALDO conoció que dentro del grupo existen líderes que tomaban decisiones y estas eran respaldadas por el técnico, causando malestar en otros jugadores.
Resultados y pobre juego
El Junior del Zurdo jamás consiguió enamorar a la afición rojiblanca. No lo hizo cuando, con tan poco, le alcanzaba para lograr resultados positivos y menos cuando llegaron las derrotas o los amargos empates en condición de local. Junior fue un equipo irregular de la mano del técnico argentino. Jugaba partidos para el recuerdo y otros para el olvido, sin poder encontrar una regularidad y una identidad en su fútbol. De local siempre le costó, tanto con los equipos grandes como con los denominados chicos. La estrategia conservadora como local y el excesivo respeto mostrado ante rivales como Nacional, Millonarios, Santa Fe, entre otros, no fue bien asimilada por la afición, que pedía un equipo valiente, alegre, atrevido y que fuera protagonista en cualquier estadio del país. Las tres derrotas consecutivas en la Liga Postobón I-2014 le costaron el puesto al Zurdo, un técnico que siempre estuvo bajo la lupa de la exigente afición rojiblanca.
Resistencia en la hinchada
Desde que inició su séptima etapa en el Junior (reemplazó en el cargo a Alexis García) el Zurdo contó con la resistencia de la afición rojiblanca. Para nadie es un secreto que el argentino, a pesar de haber salido campeón en el 2004 y de hacer parte de la historia del club, siempre ha sido un entrenador polémico en Barranquilla. Sus equipos nunca han gustado, ya sea por su filosofía de juego o por su irregularidad futbolística. En esta oportunidad, la hinchada le cobró cada uno de los errores cometidos y lo señaló como el principal culpable de las últimas derrotas cosechadas en la Liga Postobón I-2014. Son muy pocos los que apoyan su gestión, ni en los momentos de mayor estabilidad deportiva las críticas cesaban. Y esa animadversión aumentó este semestre con el reencauche de un jugador polémico y criticado por la afición como Édinson Toloza. La llegada del delantero nariñense, quien había rechazado la posibilidad de continuar en el equipo a principio de año, terminó de deteriorar la relación técnico–afición.
Pésimas decisiones
Fueron muchas las decisiones tácticas y de escogencia que le criticaron los aficionados y la prensa deportiva en general al técnico Miguel Ángel ‘El Zurdo’ López. Como por ejemplo, la habitual mala confección del banco de suplentes, el sistema conservador que utilizaba en algunos partidos en condición de local, la escogencia de los jugadores concentrados, la utilización de un solo delantero cuando tenía más posibilidades en la plantilla para experimentar, la improvisación posicional de jugadores, los refuerzos que trajo para el inicio de esta temporada —malestar que venía desde el año anterior con la llegada de jugadores extranjeros como el brasileño Marcelo Macedo y el argentino Emmanuel Perea, quienes actuaron poco o no actuaron— y las pocas variantes tácticas que utilizó para sacarle mejor provecho a la buena plantilla con la que contó.
Discurso inaceptable
Si hubo algo que colmó la paciencia de los directivos y de la hinchada rojiblanca fue el inaceptable discurso del Zurdo López en las derrotas. El técnico argentino siempre se excusó con la partida de jugadores que, según él, fueron importantes en el segundo semestre de 2013 como Edwin Cardona y Édinson Toloza (si fueron tan importantes ¿por qué no eran regulares titulares?). Lo último fue la partida de Luis Carlos Ruiz al fútbol de la China. El Zurdo manifestó en su momento que a él le tocaba 'rearmar mientras los otros equipos se reforzaban', frase que no cayó del todo bien en los accionistas del equipo. Luego de la derrota 1-0 ante Alianza Petrolera, Fuad Char le reprochó la actitud del equipo en aquel juego, a lo que el Zurdo le respondió que su plantel se había 'debilitado con la salida de Ruiz'. Desde ese día la relación entre ambos se deterioró y, tras las derrotas ante Millonarios y Tolima, todo terminó con la destitución del entrenador.