Triste como todos los integrantes del Junior, así estaba el presidente del equipo Alfredo González-Rubio. El dirigente también entregó la lectura de la derrota 2-0 ante el Deportivo Independiente Medellín y cree que al equipo le faltó un poco de suerte. 'Ellos se encontraron con un gol inmerecido y no fuimos capaces de remontar, pero estamos contentos por el esfuerzo de los muchachos, que lo dieron todo. Creo que con un poco más de suerte hubiésemos podido empatar el juego', expresó al final del encuentro el dirigente.
González-Rubio cree que el Junior exageró con el toque de pelota y le faltó mayor sorpresa desde afuera del área. 'Nos faltó rematar al arco y abusamos del toque. Creo que si hubiésemos sido un poco más agresivos pateando de afuera hubiésemos podido empatar', agregó.
El Presidente fue claro en decir que al Junior le hace falta un delantero más y trabajarán para conseguirlo para el próximo torneo. 'Necesitamos otro delantero más. Tenemos dos buenos delanteros, pero Ovelar estuvo lejos de su nivel', enfatizó.
Por último, el Presidente se refirió a la tristeza del camerino del Junior. 'El vestuario parece un cementerio, todos están muy tristes', concluyó.