Rafael Carrascal ha decidido guardar silencio en torno al accidente de tránsito en el que se vio involucrado el fin de semana, en estado de embriaguez, según testigos.
El volante sucreño ha asistido a los entrenamientos del equipo rojiblanco en los últimos dos días acompañado de un chofer. Carrascal ha eludido la prensa cuando ha sido abordado, asegurando que hablará, pero en el momento que él lo vea indicado.
'Voy a hablar, pero ahora no', se limita a decir, de forma amable, cuando los comunicadores se le acercan para conocer su versión de los hechos en los que se vio involucrado.
El jugador ya dialogó con el técnico Julio Comesaña y sus compañeros, pero se mantiene entrenando al margen del grupo.