No hubo un Chará ganador en el partido que Junior y Águilas igualaron 2-2, el pasado miércoles en el ‘Metro’, pero sobraron los abrazos entre los dos hermanos al final del juego. Yimmi y Luis Felipe se vieron las caras y protagonizaron un mano a mano familiar con varios choques fuertes entre ambos, pero sin mala intención.
Como buenos hermanos, se comportaron leales entre sí, sin irrespetar los colores que defendían. 'Cada uno se dedicó a lo suyo', dijo Yimmi, que quizá sacó algo de ventaja en el duelo aparte porque convirtió un gol y puso otro.
El escurridizo extremo del Junior estuvo bien custodiado por su hermano Luis Felipe. El mayor de los Chará no dudó en meterle la pierna a su hermano menor para detenerlo. Sin embargo, nada pudo hacer cuando Yimmi marcó de golpe de cabeza el gol con el que los ‘Tiburones’ abrieron el marcador.
Antes del compromiso posaron para la foto y Luis Felipe cargó y abrazó a su sobrino, Juan Pablo. Al final del juego los dos hermanos se volvieron a entrelazar de manera afectuosa. Seguro que sus padres quedaron satisfechos con el 2-2.
'Esto es fútbol, cada quien defiende sus intereses y vela por su trabajo. Fue un lindo partido. Junior siempre trata de ir adelante, pero lastimosamente no pudimos ganar', sostuvo el atacante tiburón.
