La derrota de Junior en el estadio Atanasio Girardot fue inmerecida e injusta. El 1-0 a favor del Atlético Nacional, anoche en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa, no es fiel reflejo de lo que sucedió en la cancha y fue demasiado premio para el local. Junior, que prescindió de sus principales figuras, controló, mantuvo a raya a los verdes y en el segundo tiempo los dominó y los atacó constantemente, pero le faltó ser más certero en sus definiciones para vencer a un arquero ágil y despierto como Christian Vargas.
El guardameta contribuyó a ahogar el grito de gol con buenas atajadas. La más asombrosa se presentó en el minuto 73 ante un disparo de Yony González que llevaba fuego y destino de red.
El primer tiempo resultó realmente frío, lento, monótono y tedioso, con pocas emociones en las áreas. Solo hubo un par de disparos de Dayro Moreno desde fuera del área, que José Luis Chunga resolvió con unos reflejos y una seguridad que se mantienen intactos a pesar del período de inactividad en el que estuvo por una lesión.
Ya en el segundo tiempo, apenas a los 6 minutos de juego, Daniel Bocanegra encontró en la pelota quieta lo que parecía imposible para Nacional con el balón en movimiento: anotar un gol. El lateral, que siempre se ha caracterizado por pegarle bien a la pelota en los tiros libres, acomodó el esférico en el mismo palo que custodiaba Chunga, que jugó con la intención y pensó que el balón iría al otro poste y por encima de la barrera.
La intuición de Chunga falló y Bocanegra le dio preciso y potente al Golty. El cuidapalos barranquillero quedó quieto y fue inevitable el estremecimiento de las piolas.
El cuadro antioqueño, que se vio sin la intensidad y agresividad anfitriona de otros días, se puso en ventaja, pero solo en el marcador. En el fútbol se fueron quedando poco a poco y terminaron sometidos por Junior.
Los Tiburones, que saltaron a la cancha con un equipo B (con visos de C) porque 'la prioridad es la Liga' (según han dicho los directivos, el técnico y los jugadores desde el principio del semestre), no fueron inferiores a los verdolagas en ningún momento. Menos en el segundo período, después del gol.
Ese tanto de Bocanegra agigantó la propuesta del visitante, lo envalentonó y lo puso a buscar con mayor asiduidad la portería de Vargas.
La entrada de Luis Díaz en lugar de Kevin Aladesanmi significó mayor habilidad, velocidad y chispa por la izquierda y mayor presencia en el frente de ataque al mover a Yony González como ‘9’.
El antioqueño estuvo cerca de anotar el empate en tres acciones. Junior no pudo acertar y Nacional terminó llevándose un triunfo sin mucho mérito.
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