Junior ganó, gustó y dio un paso importante en sus aspiraciones de jugar su primera final continental en toda su historia. El triunfo ante Santa Fe (2-0), en El Campín, dejó, además de muy buenas sensaciones, un dato curioso: nueve de los once jugadores titulares en el equipo rojiblanco son costeños.
A excepción del arquero uruguayo Sebastián Viera y el lateral antioqueño Marlon Piedrahíta, el resto de jugadores nacieron de este lado del país.
En cancha había cuatro barranquilleros (Teófilo Gutiérrez, James Sánchez, Luis Narváez y Jefferson Gómez), dos samarios (Jarlan Barrera y Gabriel Fuentes), un magdalenense (Víctor Cantillo), un cartagenero (Rafael Pérez) y un guajiro (Luis Díaz). Un dato curioso y que no se puede dejar pasar por alto.
La apuesta del equipo de un tiempo corto para acá ha sido armar una nómina donde se destaque, en gran medida, los jugadores de la Costa. Ese proyecto se inició desde la llegada de Alexis Mendoza al banquillo y se ha tratado de seguir hasta ahora, cuando en el banco está el colombo-uruguayo Julio Avelino Comesaña, otro de los técnicos que se ha destacado por darle oportunidades a los jugadores de la casa y de la región.
Junior deberá ahora ratificar el paso dado ayer en Bogotá, cuando se mida nuevamente ante Santa Fe, en el juego de vuelta de la semifinal de la Copa Sudamericana, el 29 de noviembre, en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez.
