Sebastián Viera volvió a salir en hombros luego de una tanda de penales. El cancerbero uruguayo esta vez se transformó en el verdugo del Deportes Tolima en el estadio Manuel Murillo Toro. El capitán del Junior acertó su estirada en los tres cobros del cuadro pijao y fue vital para que el equipo rojiblanco de Luis Fernando Suárez se alzara con el título de la Superliga Águila, el primer título del año.
Viera, que extendió su contrato con Junior por un año y medio más, estuvo atento en los 90 minutos de juego y cuando tuvo que sacar sus brazos para ahogar el grito de gol de los locales, lo hizo. En la tanda de penales revivió tantos momentos de gloria como en Manizales, cuando impidió que el disparo de Jhon Pajoy besara la red y sirvió para que los barranquilleros levantaran su séptima estrella en el rentado local. Ayer amilanó a Sergio Mosquera, Carlos Robles y Jeison Gordillo.