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La victoria es inaplazable en Copa Libertadores. Aunque venga sufriendo de ‘empatitis’ y haya dejado escapar varios puntos ganables en la agonía de los partidos, Junior respira tranquilo en la Liga colombiana y permanece líder invicto. No se puede decir lo mismo en el campeonato internacional, donde tiene urgencia de triunfo después de dos derrotas en sus dos primeras salidas (2-0 ante Palmeiras, en casa, y 1-0 frente a San Lorenzo, de visitante).

Teniendo claro que en la competencia copera no puede incurrir en más equivocaciones (como las expulsiones de las fechas iniciales) ni conceder las ventajas que sí le permite el compromiso liguero, los Tiburones deben enfrentar a Melgar de Arequipa, en el estadio Monumental de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA), hoy a partir de las 7:30 p.m., en juego de la tercera jornada del Grupo F del torneo continental.

La obligación de victoria la dicta la ubicación en el sótano de la tabla del grupo y las posibilidades de clasificación, que están cifradas en ganar los dos partidos ante Melgar y el que resta ante San Lorenzo.

Palmeiras, que suma seis puntos en dos partidos, luce como el adversario más fuerte y parece una misión más complicada arrebatarle puntos, aunque las palabras del técnico Luis Fernando Suárez no muestran resignación, reflejan confianza, ambición y una fe intacta.

'Con este equipo yo veo que es posible la clasificación, este equipo le puede ganar a cualquiera, de eso estoy totalmente seguro, es un equipo demasiado bueno, tiene una capacidad técnica espectacular. Nosotros podemos ganar los partidos que faltan', declaró hace unos días en una amplia entrevista con EL HERALDO.

'Yo soy consciente de lo que tengo y este equipo es muy bueno. Confío en lo que podemos dar en lo que resta', reafirmó.

En todo caso, al margen de lo que pueda pasar con Palmeiras en las jornadas que restan, Junior requiere cortar hoy la racha de derrotas y sumar sus primeros tres puntos para poner oxígeno a sus esperanzas de seguir adelante en la Libertadores.

Suárez y sus dirigidos llegaron anoche a Arequipa, procedentes de Lima, para afrontar al equipo conducido por el argentino Jorge Pautasso. Once de los jugadores Tiburones, los probables titulares, arribaron a la capital peruana desde el sábado, mientras los nueve restantes llegaron el domingo, luego de participar en el 1-1 ante Jaguares, el sábado, en la Liga.

El regreso de Willer Ditta, la permanencia de Germán Gutiérrez en lugar de Gabriel Fuentes, expulsado ante San Lorenzo, y el retorno de Luis Díaz luego de su destacada participación con la Selección Colombia, son las principales novedades en la formación inicialista del cuadro caribeño.

Junior encarará a un adversario que venía volando bajo en la Liga peruana hasta el sábado pasado que se impuso 3-1 a San Martín, con una tripleta de Bernardo Cuesta, delantero argentino que pasó por Junior en 2017 (ver nota aparte).

Melgar empató 0-0 ante San Lorenzo en el debut en la Copa y luego cayó 3-0 ante Palmeiras. Los rojiblancos tendrán que superar a los pupilos de Pautasso y los 2.335 metros de altitud de Arequipa.

'Ya estamos acostumbrados a la altura, allá en Colombia jugamos en Bogotá y nos ha ido muy bien, así que eso no es problema', declaró Teófilo Gutiérrez a la prensa peruana luego de la práctica del lunes.

Contra Melgar, contra la altura, contra viento y marea, Junior se encuentra en un momento de esos cuando ganar es la obligación.