Hubo ‘mea culpa’. Sebastián Viera no se quejó por las tres fechas de sanción que le impusieron 'por conducta violenta contra un adversario' tras la derrota 2-0 ante Millonarios, el pasado domingo en el estadio El Campín de Bogotá, y salió a poner la cara por lo que considera un error.
'Agacho la cabeza, no solo por la derrota, si no para ofrecer unas sinceras disculpas por mi comportamiento', expresó el arquero y capitán de Junior a través de su cuenta en Twitter.
'En 18 años de profesionalismo muy poco he perdido la templanza que me caracteriza. Fui provocado, y la impotencia jugó en mi contra. Me equivoqué y no hay excusa', agregó.
Viera fue uno de los cinco jugadores rojiblancos sancionados luego de la trifulca que protagonizaron con integrantes del equipo azul al final del duelo de vuelta de la semifinal de la Liga.
El arquero, que no suele estar involucrados en ese tipo de circunstancias, respondió con agresiones a las provocaciones de Ricardo ‘el Caballo’ Márquez, quien generó todo el barullo, según el informe arbitral registrado por el árbitro Jorge Tabares. El delantero samario recibió tres jornadas de suspensión.
En su cuenta de Twitter, Viera también escribió que espera que vengan mejores tiempos y resultados deportivos para los ‘Tiburones’.
'A futuro, y con la misma templanza y humildad, me comprometo a seguir luchando y respetando estos colores dentro y fuera de la cancha. A mi familia, a la afición, a la dirigencia y al fútbol, asumo mi error. Vendrán mejores días', concluyó.
Cinco jugadores de Junior y solo dos de Millonarios resultaron sancionados luego de la tángana presentada entre integrantes de ambos clubes,
La resolución 023 del Comité Disciplinario del Campeonato de Fútbol Profesional, emitida este miércoles a través de la página web de la Dimayor, dicta que Sebastián Viera, Willer Ditta, Larry Vásquez, Hómer Martínez y Didier Moreno resultaron suspendidos 'por conducta violenta contra un adversario'.
Viera recibió tres jornadas de sanción, Ditta, dos; Martínez, seis; y Moreno, seis. Vásquez, que vio la roja en un conato de bronca en la agonía del juego, debe pagar dos partidos de sanción.
