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No habló de la pelota. No se refirió al retroceso futbolístico de Junior. No dijo nada de las cuatro derrotas consecutivas en condición de visitante. No charló sobre la falta de creación y de gol en los dos últimos partidos. No reconoció el desorden y la confusión en su equipo. No admitió los garrafales errores y las libertades en la defensa. No explicó por qué se demoró tanto para hacer sustituciones y por qué Luis ‘Cariaco’ González fue su última opción. No aplicó ni predicó eso de 'salir a presionar y ganar en todas partes'. Juan Cruz Real, técnico de Junior, no tocó ninguno de los temas que realmente le interesaban a la afición y a la prensa después de la derrota 2-0 ante Medellín, este miércoles en el estadio Atanasio Girardot, en la séptima jornada de la Liga I 2022.

El pésimo resultado y, sobre todo, la floja presentación en la capital de Antioquia, la segunda en línea sumando la caída 1-0 en Manizales ante Once Caldas, fueron ignoradas por el entrenador argentino y excusadas por lo que consideró un trabajo arbitral sin neutralidad de parte del central, Andrés Rojas, y sus asistentes.

Cruz Real llegó con cara de enfado a la rueda de prensa y ante la primera pregunta, empezó a explicar que no tenía ganas de hablar de fútbol, y no aceptó más interrogantes.

'La verdad es que no voy a hablar mucho del juego, voy a hablar algo ahora y va a ser todo lo que voy a decir, porque yo creo que ya viene repetitivamente el tema, hay que hablar del tema porque nadie habla, el otro día en Manizales, en los primeros minutos el VAR se rompió, y hay una plancha contra un jugador nuestro que no se pudo revisar…'.

Así comenzó su retahíla de quejas contra los árbitros. Sus palabras criticando la labor de los encargados de impartir justicia en este y anteriores compromisos se vio como una cortina de humo para ocultar lo que todos vieron: Junior fue superado de cabo a rabo por el Medellín. No progresa en su fútbol y sigue mostrando graves falencias.

'Hoy fuimos muy visitantes acá, por la gente que acá en Medellín acompaña mucho, y por el árbitro', señaló el timonel rojiblanco, que estuvo acompañado por el arquero y capitán, Sebastián Viera.

'A veces son con las pequeñas cosas que empiezan a meterte en el área propia, no tengo ganas de hablar del juego. Paren un poco, si queremos que el fútbol sea competitivo de verdad, hay cosas que debemos dejar de hacer', añadió en su sorpresivo discurso, Cruz Real.

Realmente no hubo jugadas polémicas trascendentales durante el juego para señalar como culpable de la derrota a las decisiones de los réferis.

Sobre la actuación de sus dirigidos, metió las manos al fuego y asumió toda la responsabilidad. 'Quiero reconocer que han entregado todo, y me hago responsable de todo lo que tiene que ver con el grupo'.

En sus últimas palabras ratificó: 'Fuimos muy visitantes, espero que con Junior sean más imparciales'.

Luego, en el remate de una respuesta que daba a Viera, se levantó y se despidió. 'Yo me retiro, buenas noches'.