Con las maletas cargadas de sueños y metas por cumplir viajó ayer a Perú, el técnico samario, Carlos Silva Socarrás, quien asumirá las riendas del Club Deportivo Unión Comercio, de la primera división fútbol profesional inca. Aunque se mostró motivado y orgulloso por la oportunidad, el timonel se lleva un sinsabor por cortar el proceso que lleva adelantado en las divisiones menores de su amado Unión Magdalena.
Paradita, como es conocido cariñosamente el entrenador, se encuentra agradecido con el Ciclón Bananero, institución a la que llevaba vinculado por más de 20 años. 'Al Unión le debo todo, allí me enseñaron a ver el fútbol, allí me hice técnico y allí es donde me dieron la posibilidad de crecer como persona para darle una mejor estabilidad económica a mi familia', comentó Silva, a quien se le notaron los ojos llorosos al despedirse de los trabajadores del club magdalenense.
AL DÍA aprovechó para dialogar con el estratega antes de su partida a territorio peruano, donde seguirá imponiendo sus conocimientos futbolísticos.