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La economía en Atlántico creció en un promedio del 5% en los últimos trimestres, jalonada por los sectores financieros y de servicios sociales y públicos, con una representación del 20% y el 15%, respectivamente, según un análisis realizado por BBVA Research.

El sector industrial representó el 14% de la actividad económica del departamento, mientras que el agro llegó a significar el 2%.

Otro aspecto que destaca en estudio es que las tasas de pobreza y desempleo se mantienen por debajo de la media observada a nivel nacional. Según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), a nivel nacional 28 de cada 100 personas están en situación de pobreza, mientras que en Atlántico son 25 de cada 100. En cuanto al desempleo, en el trimestre de noviembre 2014 a enero 2015, Barranquilla se ubicó entre las ciudades con menor índice con un 6,9%.

'Lo que vemos en nuestro análisis es que el perfil de empleo en Barranquilla mejora al igual que en el resto del país, lo que sin duda es un signo positivo. Barranquilla tiene muchos potenciales porque ha logrado reducir los niveles de pobreza y desempleo', afirmó Mauricio Hernández, economista senior de BBVA Colombia.

En lo que corresponde al comportamiento del ingreso por persona, el departamento aún tiene retos importantes, pues aunque ha crecido a buen ritmo está por debajo del promedio del país. 'Atlántico y en especial Barranquilla tienen mayor espacio de crecimiento que ciudades como Medellín', señala Hernández.

El análisis prevé una desaceleración en el ritmo de crecimiento económico, lo que se refleja en las expectativas de ventas esperadas por los comerciantes para el siguiente trimestre que muestran una tendencia a la baja.

Sector Automotriz

El estudio de BBVA apunta que el mercado de autos en el Atlántico aumentó un 5%. 'La venta de autos en el Atlántico muestra una dinámica estable, lo que vemos es que las ventas aumentaron en 5%, jalonadas por los mejores indicadores de la ciudad en cuanto a ingresos y empleo, además por la baja penetración vehicular que aún tiene la ciudad en comparación con otras ciudades del país y del mundo', afirmó el economista.

Aunque existen señales de desaceleración en el sector automotor, provenientes del decrecimiento anual de las ventas en los primeros meses del año, la reducción de las importaciones, la reducción de la confianza de los hogares y la acumulación de inventarios en los concesionarios, en el estudio consideran que a mediano plazo las perspectivas son positivas.