Compartir:

En una cuenta regresiva se encuentra la Costa Caribe frente al alza en el precio del gas, ya que hasta el 30 de noviembre hay plazo para que la Comisión de Regulación de Energía y Gas, Creg, atienda la petición de los gremios, industriales y fuerzas vivas de la región para que cambie la fórmula con la que se actualizarán los contratos de suministro de largo plazo del combustible.

El gerente de la empresa Gases del Caribe, Ramón Dávila, en entrevista con EL HERALDO, afirmó que de no presentarse un cambio en la fórmula el aumento del gas será permanente.

El empresario dijo que preocupa la competitividad de la industria de la región frente a otras regiones y en el contexto internacional con los altos precios que tendría el gas.

¿Ante la cercanía de la fecha para actualizar los contratos de largo plazo que espera la región?

La fecha límite para que la Creg cambie la fórmula es el 30 de noviembre, esto preocupa porque el gas va subir no solamente con la inflación sino que esta se aplicará al precio base en dólares, el cual ha aumentado con la devaluación. Este año habría un incremento muy alto que podría llegar a un 50%.

¿Cuál es el cambio recomendable para evitar el aumento?

Que se elimine de la fórmula la Resolución 089 de 2013 y solamente se apliquen los componentes del WTI y el Índice de Precios al Productor (IPP) de Estados Unidos. Es necesario que se eliminen los topes hacia arriba y hacia abajo, retirar el límite de la inflación. Si no se hace esto el gas nunca bajará y subirá en forma permanente.

¿Qué peso deberían tener estos dos componentes?

Teniendo en cuenta las subastas que han hecho recientemente los productores en el país y los precios a los que las térmicas han comprado el gas, realmente se debe dar un peso entre el 45% al 60% al WTI para que el precio del gas baje. También se podría dar un 50% a cada uno de los componentes.

¿Por qué se necesita este cambio?

Se requiere de un cambio estructural para que el precio del gas se corrija y esté en concordancia con los precios internacionales que vienen bajando.

¿Cómo se manejaba el precio del gas antes de la Resolución 089 de 2013?

Durante unos 35 años tuvimos una fórmula tarifaria que regulaba el precio del gas de La Guajira, cada seis meses, con el precio del fuel oil que se exportaba por el puerto de Cartagena y en este tiempo se mantuvo una competitividad relativa frente a otras regiones e internacionalmente.

¿Si no hay cambio como queda la industria de la Costa Caribe?

Las industrias costeñas no podrán competir en el exterior ni con el interior del país, ya que en Bogotá, donde está la mayor base industrial en Colombia, el precio del gas está en promedio unos USD1,40 más barato, es decir un 40% menos en comparación con la industria de la Costa Caribe.

¿Cuál sería el aumento para la tarifa de los industriales y de los usuarios residenciales?

Si se mantiene la fórmula actual el aumento que se proyecta para el sector industrial está en promedio de un 35% en su tarifa final y de un 20% para los usuarios residenciales.

¿Se presentó al Gobierno un estudio del experto Guillermo Perry, cuál era su recomendación sobre la fórmula?

Su recomendación técnica es que en la fórmula solamente deben haber factores exógenos como el precio del WTI y el IPP de Estados Unidos, porque una variable como la de la Resolución 089 de 2013, que recoge la variación de los contratos en el último año afecta mucho los precios del gas.

¿Los precios también se afectan por el desabastecimiento de gas en La Guajira?

Hay dos factores que llevaron a esta situación pues durante ocho años se hicieron exportaciones de gas a Venezuela con un promedio de entre 100 y 200 millones de pues cúbicos diarios. También desde La Guajira se mandan 150 millones de pies cúbicos diarios al interior del país, lo que equivale a un 30% de la producción de la región. Los precios altos son producto de la escasez inducida por estos hechos.

¿Qué está haciendo el Gobierno frente a esta situación?

Sabemos que el ministro de Minas y Energía, Tomás González, está trabajando para evitar que se presente el desabastecimiento en la región.