El que una ciudad se consolide como destino de turismo de negocios trae grandes beneficios para su economía y para los actores de la cadena de valor del sector, afirma, el empresario y experto en turismo, Eduardo Chaillo Ortiz.
El empresario y experto internacional es el conferencista invitado de Foros Proyecto BAQ de EL HERALDO que se realiza mañana con el tema 'Sectores Competitivos en desarrollo'.
¿Qué condiciones debe tener una ciudad para consolidarse como destino de turismo de negocios?
Es importante que cumpla con el requisito de hacerle fácil la vida al organizador de eventos con un buen equilibrio en infraestructura (metros cuadrados/cuartos de hotel) y conectividad (cantidad de vuelos y movilidad terrestre); sin embargo, los eventos no llegarán por que se cuenta con un buen recinto o marcas globales en hotelería; los congresos, convenciones y exposiciones seguirán el curso de una economía pujante, de un ambiente de negocios abierto, de un sector académico participativo y de asociaciones locales (gremios) influyentes. Es decir, es más importante el cómo la ciudad aporta al contenido del evento y provee el mejor contexto para su desarrollo, que la infraestructura en sí misma.
¿Es importante el trabajo conjunto entre los sectores público y privado para atraer el turismo de negocios?
Es fundamental. Los mejores modelos de organizaciones de marketing de destino son aquellos en donde tanto el sector privado como el público asumen el rol que les toca jugar y trabajan en equipo. La calidad en los servicios, la profesionalización de los cuadros, la capacidad de respuesta y la competitividad en la relación de valor los aporta el sector privado; cuando la estabilidad, la promoción de la marca país, la coordinación de los jugadores en la industria, la facilidad migratoria/aduanera, y los incentivos fiscales normalmente le tocan al sector público.
¿Qué impacto económico tiene el turismo de negocios en una ciudad?
Los visitantes de reuniones suavizan la estacionalidad de la demanda turística tradicional, tienen un patrón de estadía más largo y un alto gasto promedio; también se vuelven un excelente multiplicador de los esfuerzos de promoción, pues es un multiconsumidor que después puede ser un visitante de placer, aventura, cultura o negocios y si le va bien, es el mejor embajador de los atributos de un destino. La derrama económica (directa e indirecta) es un aspecto importantísimo en las ciudades en cuanto a la generación de empleos y la generación de cuartos noche, sin embargo, las reuniones también importan conocimientos, detonan infraestructura e inversión, atraen acciones de responsabilidad social, promueven el intercambio cultural y ayudan a mejorar la reputación de los destinos.
¿Qué sectores impacta esta actividad?
La industria de reuniones genera beneficios económicos no solo a los proveedores de servicios turísticos tradicionales (hoteleros, restaurantes, transportistas, etc.) sino a otro tipo de empresas especializadas (audiovisuales, montaje, edecanía, traducción, producción, etc.), lo que hace que su impacto llegue a capas mucho más extensas de la comunidad receptora.
¿Cuáles son las tendencias actuales del turismo de negocios?
La utilización del ‘BigData’ por ejemplo, para conocer el comportamiento de consumo de organizadores potenciales y participantes de eventos en la ciudad, pudiendo así ofrecer soluciones adecuadas a sus patrones. La transparencia en las relaciones comerciales de los actores es algo muy importante, sobre todo en mercados verticales rentables como el farmacéutico o el financiero. El transitar de ofrecer apoyo logístico/transaccional a convertirse en aliado estratégico de la asociación o corporación que trae eventos a mi destino es importante.