Francisco Martínez pidió vacaciones en su trabajo habitual por estos días. Y no precisamente para gozarse el carnaval. Desde hace varias semanas viene preparando junto a su esposa y un cuñado una improvisada venta de cervezas, agua, bebidas y hasta meriendas tipo hayacas y sopa de pollo para vender en los diferentes eventos carnavaleros en los que se pueda ubicar.
Martínez y su familia hacen parte del comercio informal que para esta temporada aumenta en la ciudad. De acuerdo con la Federación Nacional de Comerciantes seccional, Fenalco, de las casi 30.000 personas que realizan actividades relacionadas con el carnaval, 12.000 lo hacen en la formalidad y 18.000 en la informalidad, con ocupaciones transitorias.
El gremio ha podido establecer que por cada tres pesos que se mueven en la economía formal, se mueve uno en la informal.
Además la mayoría del comercio informal se concentra en actividades como el alquiler de silletería, venta de bebidas alcohólicas y alimentos, reventa de boletería para los conciertos y eventos que se realizan en diferentes puntos de la ciudad durante los cuatro días, ventas de ropa y accesorios, etc.
Quiénes son los que trabajan
Un análisis realizado por Fundesarrollo indica que no es claro el impacto del carnaval en el empleo, ya que el número de ocupados que se genera en esta temporada es pequeño en comparación con el total de ocupados, a lo que se suma el carácter temporal de los empleos.
Una proyección a 2014 del estudio 'Carnaval de Barranquilla 2008: Impacto Económico Local', señala que el número total de nuevos ocupados alrededor de las fiestas era de 11.007 personas, mientras que ese año según el Dane hubo 812.711 ocupados en el área metropolitana de Barranquilla.
El centro de investigaciones señala que también se debe considerar que hay una población que normalmente labora el empleos formales o de forma independiente y que en carnaval entra a trabajar en las ventas informales. Se calcula que constituyen un 77,3% de los ocupados informales.
Adicionalmente están quienes encuentran en estas fiestas un espacio para obtener ingresos económicos, es decir un ‘rebusque’. El estudio revela que un 22,7% de los ocupados informales correspondía a personas desempleadas.
Aumento de las ventas
Fenalco Atlántico prevé que las ventas del comercio en la ciudad durante la temporada de carnaval 2016 aumenten en un 4,7%.
El presidente de la junta directiva de Fenalco Atlántico, Rafael Madero, afirma que se calcula en 60 mil millones de pesos el nivel de ventas del comercio en precarnaval y carnaval, lo que genera un gran impulso para el sector.
Los grupos que registran un mayor dinamismo son el de bebidas y alimentos, donde el segmento con las mayores ventas es el de bebidas alcohólicas.
Los otros sectores que reportan un aumento en las ventas son confecciones, música, artesanías, fotografía, medios audiovisuales, hoteles, restaurante y transporte.
'Las actividades económicas que alcanzan el pico en su curva de ingresos son: las agrupaciones musicales, las artesanías, venta de bebidas alcohólicas, hoteles y residencias, y confecciones. Además del incremento en restaurantes, bares, transporte especial, y medios audiovisuales', señala.
El dirigente gremial asegura que el dinamismo del comercio comienza desde el precarnaval, lo que hace que los negocios de venta de ropa, accesorios y otros inicien sus ventas semanas antes.
El estudio sobre el impacto económico local del carnaval, citado por Fundesarrollo revela que el consumo durante los días de carnaval, aparte de la demanda por el servicio de palcos y minipalcos, corresponde a alimentos y bebidas (64,4%); sillas (13,1%); espumas y accesorios de carnaval (14,7%) y otros (7,8%).
Por su parte, la Cámara de Comercio de Barranquilla ha identificado 59 sectores que duplican la inversión relacionada con el carnaval, entre las que se encuentran los servicios de asociaciones y esparcimiento que participan en desfiles, eventos y conciertos.
Consumo de licor
Uno de los sectores que saca el mayor provecho a esta fiesta es el de alimentos y bebidas.
'Para nadie es un secreto que el consumo de bebidas alcohólicas en carnaval, ya sea en febrero o marzo, se incrementa significativamente, representando uno de los meses con más alto consumo', señala Madero.
La venta de licor y cerveza en carnaval solamente es superada por la de Navidad y Año Nuevo. El gremio calcula que las ventas en este segmento se triplican en la temporada carnavalera.
En la edición 22 de la revista +negocios de EL HERALDO, que tiene como tema central el Carnaval de Barranquilla, señala que un negocio como La Troja, estadero ubicado en la cra. 44 con calle 74, puede llegar a vender 250 canastas de cerveza en un día de fiesta, lo que equivale a ingresos superiores a los $24 millones por noche, solo por concepto de comercialización de cerveza.
'Son 50 años divirtiendo y reuniendo a la gente barranquillera. Lo que inició como una pequeña tienda de fritos normal, con un tocadiscos en carnaval, hoy es un generador de empleo y alegría', dijo Edwin Madera, propietario de La Troja, a +negocios.
Quiénes son los consumidores
Fundesarrollo explica que los resultados de la encuesta de percepción Barranquilla cómo vamos, indican que el 50% de los consultados afirmó que se queda en la ciudad a disfrutar del carnaval, lo que permite calcular que serían unos 725 mil los barranquilleros que toman parte de este estas fiestas.
'Teniendo en cuenta que el ingreso laboral medio de los habitantes del área metropolitana de Barranquilla fue de $718.224 en 2013, durante el carnaval hay un potencial importante de capacidad de gasto si se observa la cantidad de población que se queda a disfrutar las carnestolendas, es decir, si todas las personas gastaran en los días que dura el carnaval cerca de $99.269 de sus ingresos, podría obtenerse un monto total de $71.896 millones por concepto del consumo', indica Fundesarrollo.
Visitantes extranjeros
La Cámara de Comercio de Barranquilla, CCB, señala que el número de extranjeros que visita la ciudad en carnaval ha aumentado en los últimos años, en 2015 sumaron 799 frente a los 632 registrados en 2014. Para este año, la entidad espera que la devaluación del peso haya incentivado las visitas de turistas internacionales, lo que además impacta el consumo de bienes y servicios.