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El Contralor General de la República, Edgardo Maya Villazón, estableció dos compromisos en relación a la Actuación Especial de Fiscalización que adelanta la Contraloría sobre la Refinería de Cartagena, Reficar S.A.

En primera medida, el jefe de órgano de control aseguró que no habrá necesidad de contratar ninguna compañía para entregarle al país la información que precise con exactitud cuál fue el costo real de la construcción de la Refinería de Cartagena. Y, en segunda lugar, la actuación Especial de Fiscalización que adelanta la Contraloría en Reficar y CB&I estaría terminando en septiembre próximo.

'La Contraloría tiene la obligación y el imperativo moral de hacer esta tarea y así lo hará. Y si quedaron excedentes, vamos también a verificar a dónde fueron a parar', indicó el Contralor.

Asimismo, Maya Villazón, aseguró que 'en un universo de revisión de contratos y de costos tan grandes, tenemos que tener la información oportunamente y si no es así deberán proceder los procesos sancionatorios que aplica la Contraloría en estos casos, pues esta es la principal fuente para realizar el proceso auditor'.

Una de las complicaciones en la labor, de acuerdo con lo señalado por la CGR, es que todos los contratos de Reficar están en inglés y su traducción es de las tres empresas mencionadas, hecho que no puede ser aceptado, según el órgano de control.

Además el Contralor explicó que, para tener confiabilidad sobre el contenido de los contratos, la Contraloría busca el servicio de traductores autorizados por el Ministerio de Relaciones Exteriores.

'Esta labor de traducción hace muy dispendiosa el seguimiento que debe hacerse a los contratos. A esto se añade que en los contratos que entregan, tanto Reficar como CB&I, no se encuentra la totalidad de su contenido'.

Puntos clave. En el mismo comunicado, el Contralor General se ratificó en los señalamientos que hizo desde enero pasado la CGR sobre puntos clave del proceso de ampliación de Reficar, como las adiciones presupuestales, la inexperiencia de Glencore en construcción de refinerías, el gran error de aplicar la modalidad de costos reembolsables y lo que llamó el vergonzoso control gerencial que realizó Foster Wheeler:

Adiciones presupuestales

'En el sector público, un contrato no se puede adicionar por más del 50% de su valor inicial. Aquí hay adiciones del 100%, del 200%, del 300%, del 500%, del 1.000%, del 2.000% del valor inicial del contrato. Ese es un aspecto que debió tenerse en cuenta y controlarse desde el comienzo'.

La inexperiencia de Glencore

'Glencore no tenía la experiencia suficiente. Hasta el 2007 lo que había sido era una comercializadora internacional de materias primas de minería y de hidrocarburos líquidos. No había construido una refinería en toda su trayectoria en el mundo'.

El error de los costos reembolsables

'Aplicar la modalidad de costos reembolsables fue un gran error. Eso significa: gaste y yo pago lo que usted gasta. Me pasa la cuenta y yo le pago. Y traen una firma norteamericana de gerencia de proyectos y la Contraloría encuentra en todas las cuentas que presentan un sellito ordenando los pagos de esos costos reembolsables'. 'En esta modalidad de contratación, se pierde el derecho al pataleo, el derecho a reclamar'.

Un vergonzoso control gerencial

'El control gerencial que realizó Foster Wheeler es realmente vergonzoso. Realmente no hubo ningún control. Es un constructor gerencial de proyectos y lo que hace es poner un simple sello para que paguen la cuenta que presenta Reficar'.