De acuerdo con el informe de medición de empleo informal, publicado por el Dane, seis de cada diez empleos son informales en la Región Caribe. Durante el trimestre enero-marzo de 2016, la proporción de ocupados informales en las 23 ciudades y áreas metropolitanas a nivel nacional fue de 48,4 %; mientras que el promedio de las siete ciudades de la región fue de 61,54 %.
Según Dewin Pérez Fuentes, director del programa de Economía de la Universidad de Cartagena y director del Observatorio del Mercado Laboral de Cartagena y Bolívar, la informalidad en la Región Caribe sigue siendo fuente de preocupación y es evidencia del deterioro del panorama económico y social de la Región.
'La informalidad en la región es entre 8 y 20 puntos superior al indicador para las principales trece áreas metropolitanas de Colombia, es decir mientras que en Barranquilla que es la ciudad de la región con menor tasa de informalidad este indicador es 8 puntos superior al nivel nacional (47,35), en Sincelejo que es la más informal, la diferencia es de 20 puntos porcentuales', explica.
Sincelejo es la ciudad más informal de la Región con una tasa del 67,3 % durante el primer trimestre, seguida por Riohacha con 65,1 % y muy cerca esta Montería y Valledupar, con 63,2 % y 62,4%, respectivamente. La tasa de Cartagena fue de 56,4 %. Las únicas ciudades que registraron una disminución en informalidad fueron Santa Marta y Barranquilla, con 61,3 % y 55,1 %.
Según Pérez, en materia de oferta laboral la Región tiene falencias en la formación y acumulación de capital humano, una mano de obra con baja productividad. 'Una mano de obra de este tipo tiene muchas limitaciones para insertarse a dinámicas productivas formales, por lo que es más probable que se inserte a la economía por la esfera de la informalidad, la cual le garantiza en la mayoría de los casos ingresos precarios que reproducen la pobreza en forma intergeneracional, por ello la región tiene que hacer grandes esfuerzos en calidad y cobertura educativa', agrega.
