La industria nacional, y en especial la de la región Caribe, está a la expectativa ante el nuevo mecanismo para la formación del precio del gas que debe diseñar la Comisión de Regulación de Gas y Energía (Creg). Además ha solicitado que la demanda de las generadoras térmicas de energía no participe en el mercado nacional.
El presidente de la Creg, Jorge Pinto Noya, en entrevista con EL HERALDO, había anunciado que antes de terminar mayo de este año presentaría una propuesta sobre la metodología de indexación de precios en el sector del gas, la que además iba a ser sometida a consulta, lo cual no se ha hecho hasta la fecha.
Los empresarios le han manifestado a los expertos de la Creg que es necesario garantizar que las térmicas no participen porque de lo contrario, el precio del gas de la planta regasificación que es importado, será el del mercado para la industria costeña. Actualmente el precio del gas para la industria de región se actualiza a través de una fórmula, donde el WTI tiene un peso del 35%, cuya aplicación es opcional y solo fue adoptada por Ecopetrol.
No es algo nuevo
En una carta enviada a la Creg, a comienzos del año pasado, por Daniel Romero, director ejecutivo de la Cámara de Grandes Consumidores de la Asociación Nacional de Empresarios (Andi), ya se resaltaba la preocupación de la industria por el hecho de que la generación de seguridad de las plantas térmicas, que deben ser atendidas con el gas que se genere en la planta de regasificación, 'siga accediendo al mercado nacional, estresando el sistema y generando un incremento significativo en el precio (del gas)'.
El gremio recordó además que los grandes consumidores de energía aportaron 400 millones de dólares para la construcción de la planta.
En su momento, la respuesta de la Creg indicó que la Resolución 062 de 2013, tiene como objetivo que los generadores térmicos, en el momento que requieran cubrir generaciones de seguridad lo hagan usando el gas natural importado y solo en casos excepcionales, combustibles sustituto o gas natural nacional.
El abogado César Lorduy afirmó que las térmicas no pueden seguir compitiendo con el resto del mercado por el gas nacional, debido a que ello genera una competencia desleal. 'Ellos tienen la capacidad de pagar el gas de la generación por seguridad a cualquier precio, que en todo caso siempre les será remunerado, mientras el resto de los consumidores de gas no pueden hacerlo, porque sus competidores los sacan del mercado'.
Dijo además que el objetivo de la Creg con la Resolución 062 es que las térmicas no compren gas en el mercado nacional, 'pero no lo consigue del todo, porque lo único que limita, es que si consiguen el gas más barato en Colombia, que el importado, es a este valor al que se remunera la generación'.
Lorduy sostuvo que a las térmicas solo se les debe permitir comprar gas en Colombia cuando físicamente demuestren que no pueden importar gas, por razones técnicas o de fuerza mayor.
Explicó que esto garantizaría una mayor disponibilidad de gas para el mercado no térmico y que si la Creg insiste en que la generación por seguridad se pueda realizar con gas nacional, esta sea remunerada al precio de bolsa y no al precio de costo.
Resaltó la necesidad de que la Creg expida la resolución que corrija los problemas de formación de precios del mercado nacional por el enorme poder de los productores. 'En Colombia no se logra eficiencia de precios y en la práctica se puede comprobar esto, el país está pagando el gas más caro, de hecho no encontramos ningún país en donde al productor se le esté remunerando mejor en boca de pozo. En el mundo estos precios están entre 1,8 y 3 dólares por BTU, mientras que aquí hay precios incluso superiores a los 10 dólares', añadió.
La industria considera que por las características del mercado nacional la única forma de tener precios eficientes es simular los precios de mercados internacionales, en donde no hay poder de mercado ni por la oferta ni por la demanda. 'Esto se conseguiría permitiendo negociaciones bilaterales, pero con un tope de precio atado a mercados internacionales, menos los costos (licuefacción y flete marítimo) en que incurriría el productor para acceder a ellos', manifestó Lorduy.