Como resultado de la falta de gestión para la navegabilidad del Río Magdalena se han generado pérdidas cercanas a los $4.000 millones aseguró Miguel Ángel Espinosa, presidente ejecutivo de Fitac (Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional).
Indicó que adicionalmente se debe considerar la pérdida de competitividad de la región y de las terminales portuarias de Barranquilla, que se ven comprometidas con esta problemática, añade Espinosa. 'La gestión del río debe incluir ingeniería y control, dada su importancia para el comercio del país'.
El ejecutivo sostuvo que la navegabilidad del Río se ha convertido en el eje de muchas controversias, pero aclaró que 'más allá de los problemas inherentes esta temática, se encuentran los gremios directamente afectados y uno de ellos, quizá el más afectado, es el de los agentes logísticos'.
Para el gremio situaciones tales como la fallida APP con el consorcio Navelena, las restricciones en canal de acceso al Puerto de Barranquilla y demás problemática, se les han convertido en una situación compleja.
'Los retos diarios que enfrenta el gremio frente a esta temática son de gran importancia debido a lo que significa para este la movilidad del Río', sostuvo.
Para Fitac el control se debe dar para que se potencialicen otros usos del río, aparte del transporte como con la generación de energías con hidroeléctricas, por ejemplo.
Recordó que de la adecuada navegabilidad del Río depende también la confianza de los inversionistas, 'el sector privado ha realizado inversiones por 2.500 millones de dólares desde hace 4 años, inversiones que están paralizadas, porque no hemos pasado de la teoría a la práctica en materia de navegabilidad' añade Espinosa, quien también recalca que los trabajos y proyectos para la navegabilidad deben dar como resultado un río confiable para los inversionistas.
Preocupación de fenalcarbón
Por su parte, el presidente de Fenalcarbón, Juan Manuel Sánchez Vergara, manifestó su preocupación por la situación del calado en el canal navegable pues dijo que la ciudad y sus diferentes puertos se han constituido en los últimos 10 años en el principal punto de embarque de las exportaciones de coque siderúrgico a mercados en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica.
'Puertos como el de la Sociedad Portuaria, Palermo, Compas y Riverport, se verán afectados ya que su principal operación se concentra en los buques de hasta 35.000 toneladas, con esloras superiores a los 180 metros y éstos con calado de 8 metros no pueden ingresar a los muelles, generando que los armadores aumenten el valor de sus fletes marítimos y poniendo en desventaja a la ciudad', señaló.