Las ventas del sector inmobiliario en Barranquilla, incluyendo inmuebles nuevos y usados, se desaceleraron durante el año pasado y tuvieron una leve caída de 0,03 %, aseguró la directora ejecutiva de la Lonja de Propiedad Raíz de Barranquilla, Evelyn Martínez.
En el 2017 se vendieron 16.716 unidades en transacciones que sumaron $2,6 billones, mientras que en el mismo periodo del 2016 se colocaron 17.236 unidades por $2,4 billones.
'Si bien Barranquilla ha sido una de las pocas ciudades colombianas con un crecimiento positivo en ventas de vivienda nueva, ya comienza a sentir los efectos de la situación al registrar caídas en el segmento no VIS, especialmente en la ralentización de bienes ubicados en estratos altos 5 y 6', indica un análisis de la Lonja.
El gremio llama la atención sobre el aumento de los niveles de rotación de venta y arrendamiento de inmuebles, especialmente de destino comercial con una desocupación del 20%. A esto se suma el aumento en la brecha de oferta de oficinas.
Este año también comienza a verse en impacto de la aplicación del IVA del 5 % para la venta de inmuebles nuevos con valor superior a los $850 millones. Los segmentos con precios inferiores a $173 millones tienen variaciones positivas.
Para el caso concreto de Barranquilla, el gremio señala que es la ciudad donde se paga el porcentaje total más alto en una compra venta de inmuebles por los impuestos, tasas y contribuciones que requiere.
'Confiamos en la recuperación de la actividad inmobiliaria a partir del 2019, con el subsidio a la tasa de interés para compra de vivienda, mayor confianza inversionista, la demanda por viviendaa usada porque se puede adquirir a precios favorables, ya que el mercado comienza a presentar estabilización de precios', dijo Martínez
