Estados Unidos es amigo y aliado de Colombia y el nuevo presidente que resulte electo en la segunda vuelta contará con el compromiso de seguir trabajando tal como lo han hecho en los últimos 20 años, afirmó el embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin Whitaker.
'Puede contar con nosotros, ese es el mensaje que daremos al nuevo gobierno sea quien sea', señaló.
El diplomático se mostró tranquilo frente a la decisión que tomarán los colombianos en la urnas el próximo 17 de junio y dijo que se propone hablar con el presidente electo para darle la visión del Gobierno estadounidense sobre Colombia, como se ha hecho en ocasiones anteriores.
Sostuvo que Colombia siempre ha sido un país de 'centro' y que esto se evidencia en las políticas financieras que se aplican.
Preocupa aumento de coca
El aumento de los cultivos de coca en Colombia preocupa al Gobierno de Estados Unidos, por lo que la búsqueda de soluciones a esta situación será un tema 'prioritario' a tratar con el nuevo gobierno del país, dijo el embajador durante un conversatorio realizado ayer, en la asamblea de AmCham Barranquilla, con el exembajador William Brownfield y moderado por el director de EL HERALDO, Marco Schwartz.
El diplomático señaló que hay preocupación sobre ciertos indicadores que está registrando el país y señaló que ya 'hay cambios en la mentalidad en Washington frente a lo que pasa en Colombia y hay que tomar nota de eso'.
Indicó que para su Gobierno el tema de las drogas –no solo cocaína, sino los opioides– son un motivo de gran preocupación.
'Preocupan los altos niveles de coca en Colombia, hay más ahora que nunca, ustedes lo saben mejor que yo, más coca es más cocaína y más problemas con seguridad y salud pública en ambos países', manifestó durante el conversatorio organizado por AmCham y EL HERALDO.
Relaciones van bien. Dijo que es difícil calificar la relación entre Colombia y Estados Unidos en terminos de avanzar o retroceder, pero destacó que hay una trayectoria de 20 años en los que se han logrado importantes avances.
'Las relaciones van muy bien, se ha dado un aumento de la asistencia de Estados Unidos a Colombia, para ayudar en lo que esperamos sea un posconflicto', dijo el embajador.
Por su parte Brownfield dijo que Colombia y Estados Unidos en los últimos 20 años han desarrollado una relación bilateral histórica positiva de cooperación y colaboración.
El regaño de Trump
Sobre el que se consideró un regaño del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al presidente Santos, durante una llamada en la que el mandatario colombiano buscaba solidarizarse por los efectos del huracán Harvey, el embajador dijo que el jefe de Estados de EEUU buscaba expresar su preocupación por los niveles de coca y cocaína.
'El presidente Trump es un presidente atípico, habla como y piensa, y ese era su pensamiento, el trabajo que tenemos nosotros es mostrarle el completo conjunto de lo que es Colombia', añadió.
De acuerdo con Whitaker, una de sus funciones es explicar ante el Congreso de Estados Unidos los avances que se han logrado en la lucha contra las drogas y por qué luego de la firma de la paz con las Farc hay más coca.
'Lo más importante es ver qué hacemos ahora, lo que necesitamos es sugerir políticas para contrarrestar esto', añadió.
Indicó que se está trabajando para evitar que no se certifique al país en la lucha contra las drogas, y para ello es fundamental las aplicación se políticas bilaterales para dar respuesta a la problemática.
Ambos coincidieron en que no se puede pensar que haya a futuro cambios fundamentales en las instituciones democráticas de Colombia.