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Los gobiernos de Estados Unidos, México, Panamá y Colombia acordaron intercambiar información financiera en procura de ponerle freno a una red internacional de corrupción que se estaría presentando con el Comité Local de Abastecimiento y Producción (Clap) de Venezuela y que involucraría a empresas y personas en varios países.

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, aseguró que se ha detectado que empresas de varios países, entre ellos Colombia, venden productos para el programa de distribución de alimentos con sobreprecios de hasta 100% y 200% con el fin de generar recursos adicionales que luego entregan al régimen venezolano.

'Esta es una práctica corrupta que está quitando los recursos a los venezolanos que deberían ir a su alimentación', dijo el ministro.

Durante una reunión realizada ayer en Cartagena con los ministros de Hacienda de los cuatro países, se acordó seguir el trabajo de las unidades de inteligencia financiera (Uif) para establecer cómo operan las redes, quiénes hacen parte de estas, qué bancos usan y cómo regresan los recursos a los funcionarios venezolanos o a sus testaferros, con el fin de construir casos penales que serán puestos a consideración de la justicia de cada país.

Ya se ha empezado a hacer la respectiva judicialización en algunos países y las entidades competentes ya comenzaron las individualizaciones de las personas que hacen parte de estas redes', agregó Cárdenas y dijo que hay colombianos involucrados en esta práctica, entre ellos empresas de Barranquilla.

Los ministerios de Hacienda de los cuatro países condenaron el robo de fondos del programa venezolano de ayuda alimentaria y destacaron la 'importancia de la coordinación internacional para combatir las redes de financiación ilícitas que respaldan el régimen represivo del presidente Maduro'.

De esta manera, compartieron información financiera sobre las redes de corrupción que se están beneficiando a costa del sufrimiento del pueblo venezolano. Tras varios meses de trabajo conjunto, varias líneas de investigación se encuentran en curso, y se ha tomado la decisión de incorporar a países adicionales, para continuar el proceso de investigación conjunta.

Sumado a las prácticas irregulares del Clap, el ministro Cárdenas explicó que se está dando el hecho de que a las cajas alimenticias les están sacando los alimentos de mayor valor para distribuirlos en el mercado negro.

'Ese comportamiento está asociado a las Fuerzas Armadas Venezolanas. Quitan el producto de mayor valor y lo están comercializando de manera irregular y las cajas de alimentos llegan reducidas a los beneficiarios finales. Todo esto demuestra un entramado corrupto'.

El grupo de cuatro países, al final de la reunión, reiteró el apoyo al pueblo venezolano y el mismo se fundamenta en una mano tendida para los necesitados, pero un pulso firme para dar con los responsables de la que dieron en señalar como una crisis política, social y económica en Venezuela.