En Atlántico operan 23 alianzas productivas con inversiones por $6.762 millones con las que se benefician 1.041 productores del sector agropecuario, aseguró el viceministro de Desarrollo Rural, Javier Pérez Burgos.
Las alianzas son una de las banderas del Gobierno para avanzar en la formalización del campo y se desarrollan en 13 de los 23 municipios del Atlántico, con una cobertura del 56,5%.
Las cadenas productivas con las que trabajan las alianzas en el departamento son lácteo (48,7%); yuca (20,2%); bovino (12,4%); ñame (7,5%); arroz (3,9%); pescado (3,7%)y melón (3,6%).
'El eje central en el que estamos trabajando en la política de desarrollo rural es el tema de la formalización porque es un elemento clave para tener un campo competitivo, rentable y que rompa la barrera de productividad', señaló.
El funcionario dijo que a nivel nacional se han realizado más de 500 alianzas con inversiones que superan los $192 mil millones. Esta iniciativa fomenta el modelo de agricultura por contrato y formaliza la comercialización del campo.
'Con esto buscamos que el campo sea más rentable y competitivo y que aumente la inversión en el sector. Buscamos cerrar las brechas de comercialización y formalizar la actividad agropecuaria', señaló.
Indicó que se proyecta que en abril del próximo año se lanzará una nueva convocatoria de alianzas productivas con el fin de impulsar los esquemas de agricultura por contrato.
El viceministro dijo que para lograr mejores resultados con esta iniciativa, las alianzas deben tener alto valor agregado y esquemas de inclusión financiara con los que se garantice las sostenibilidad y crecimiento.
'A futuro las alianzas implicarán que los productores deban tener acceso a los instrumentos financieros con créditos y aseguramiento', indicó.
Las alianzas y asociaciones productivas son un factor clave en la productividad del agro colombiano, ya que los modelos asociativos de crecimiento, inteligencia de mercados y aliados comerciales permiten asegurar el futuro del campo.
Para el viceministro Pérez, en este proceso es fundamental la labor que realicen los nuevos alcaldes y gobernadores para identificar los sectores que tienen oportunidades para realizar nuevas alianzas de acuerdo con las vocaciones productivas de sus territorios.