El presidente de la Federación Nacional de Biocombustibles (Fedebiocombustibles), Jorge Bendeck, advirtió que la industria nacional de bioetanol se encuentra en riesgo por las importaciones que se realizan desde Estados Unidos y que actualmente llegan a un 40% del mercado colombiano.
El dirigente gremial dijo que el producto nacional no puede competir en igualdad de condiciones con el etanol que llega a Colombia de EEUU, ya que este cuenta con subsidios que llegan hasta el 30%.
'Los mayoristas prefieren comprar el producto importado a un precio más bajo que el nacional, sin considerar que este tiene unas condiciones ambientales superiores al importado, ya que el etanol de caña de azúcar reduce en más del 74% las emisiones de gases de efecto invernadero y genera menor material particulado', sostuvo Bendeck.
De acuerdo con los datos de la Federación, en el país hay una capacidad instalada de producción de 594 millones de litros al año de bioetanol y en 2018 solo se produjeron 451 millones de litros, frente a un consumo interno de 652 millones de litros.
Actualmente, la producción llega a 370 millones de litros y el resto de la demanda es atendida por el producto importado que representa más de 200 millones de litros de etanol de maíz.
'Como van las cosas el impacto va a ser superior al esperado y si el Gobierno no toma las medidas necesarias, tendremos que cerrar la industria', agregó.
Indicó que además están en riesgo más de 10 mil empleos que genera la industria del etanol en Colombia.
Recordó que el Gobierno impuso derechos compensatorios provisionales del 9,36% al etanol importado durante cuatro meses, desde el pasado 8 de mayo mientras se realizaba la investigación de los subsidios al etanol en EEUU.
Paradójicamente y a pesar de las medidas compensatorias, las importaciones de bioetanol de Estados Unidos aumentaron en un 77%, entre mayo y junio de este año, con respecto al mismo periodo del 2018.
Según el presidente de Fedebiocombustibles, esto demuestra que los derechos compensatorios provisionales del 9,36% no son suficientes para equilibrar el mercado ni hacer que la industria nacional pueda competir en igualdad de condiciones con los importadores.
'No pedimos proteccionismo ni que suspendan las importaciones, pero buscamos la imposición de medidas compensatorias que contrarresten los subsidios con los que se produce el bioetanol en Estados Unidos y poder competir en igualdad de condiciones', señaló.
Indicó que la imposición de Derechos Compensatorios es legítima cuando un producto importado pone en riesgo a una industria local, afectando el empleo y la producción nacional.
En Colombia operan seis plantas de bioetanol que pertenecen a los ingenios azucareros, las cuales están ubicadas en Valle, Cauca, Caldas y Risaralda. Además, en 2017 entró en operación Bioenergy, destilería de Ecopetrol en el Meta.
El dirigente gremial explicó que el bioetanol nacional tiene un precio regulado y dicha regulación comprende, incluso, la estructura de la distribución; mientras que el bioetanol importado no está sujeto a las limitaciones de la regulación y está en un régimen de libertad de precio.