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'Yo me río cuando me sale en la aplicación una carrera de un usuario que ofrece pagar 10 mil pesos desde Buenavista al aeropuerto', recordó Arnold Arrieta, de los nuevos taxistas que transita en Barranquilla. Solo tiene seis años al frente del volante, pero destaca que el surgimiento de las aplicaciones le ha dado un giro al servicio de transporte en Barranquilla. 'Al principio, el surgimiento de las plataformas causó un choque con empresas y conductores. Ahora con la llegada de otras aplicaciones (apps) quienes están ganando son los usuarios, porque antes no se hacían carreras de $5.000 ni teniendo un taxi en una frecuencia, ni tomándolas en las calles. Mínimo eran $6.000 y con un recorrido cerca del sector'.

Josepht Solano, de 18 años, estudiante de música, y Leonardo Tovar, su primo, habían terminado el viernes una sesión de práctica instrumental en Villa Carolina. Con un sol de justicia, los primos tocaron sus bolsillos antes de mirar sus destinos en la hora del almuerzo.

–Primo, mira esta aplicación, la descargué, me dio un código de promoción y la carrera me salió gratis –le dijo Leonardo Tovar.

–Primo, ¿cómo así? –preguntó Joseph Solano.

–Mira, he viajado cinco veces y las carreras me han salido en $5.000 y $6.000. Son códigos de promoción y de trayectos que pueden costar hasta 10 mil pesos o 12 mil pesos.

Ante la sorpresa, Josepht Solano no dudó en descargar la app.

–Hombre, yo me quiero ir también a esos precios. No me quiero ir en bus hasta Soledad 2.000.

Los primos subieron al vehículo que había solicitado Tovar y juntos llegaron a la calle 53 con calle 72, donde transita una ruta de transporte público colectivo. Tovar partió a su casa, ubicada cerca del sector, y Josepht Solano solicitó el servicio con el código que le compartió el primo. Su sorpresa fue mayúscula cuando la aplicación le arrojó que su pedido desde el norte de Barranquilla hasta Soledad 2.000 saldría por $2.400. Un costo que Solano consideró como la tarifa más económica que pagaría por un servicio de transporte en un vehículo en Barranquilla

A bordo del vehículo particular, Josepht había rebajado el bochorno en su cuerpo con el aire acondicionado a tope, pero con la curiosidad en la punta de la lengua. Desde la silla trasera preguntó al conductor.

–Ajá, yo voy a pagarle menos de $3.000, ¿y para ustedes si es rentable transportar tan barato?

–La aplicación es nueva. Está comenzando y la gente está aprovechando las promociones, respondió el conductor.

–¿Y es mejor que la otra aplicación?

–Sí, la plataforma pagará, aunque algunos taxistas no le convienen, prefieren que paguen diario y enseguida. 

Las aplicaciones han permitido aumentar los servicios en las horas que no son picos u horas valle; es decir, entre las 9 de la mañana y 11 de la mañana, y entre las 3 de la tarde y las 4:30 de la tarde, según cuentas de conductores de taxi. Cuando la fuerza laboral suspende para tomar el almuerzo o para regresar a sus casas la demanda es tan alta que no es necesario el uso en su caso de atender pedidos por la aplicación.

'En las horas pico hay es abundancia de pedidos', subraya el conductor Joaquín Gutiérrez.

Todo el fenómeno de las plataformas ha permitido a taxistas revisar los ingresos y gastos diarios generados por pagar una frecuencia diaria con una empresa del sector del transporte, frente a las entradas y egresos que pueden producir como afiliados y usuarios de una plataforma.

'Cualquiera puede estar en una aplicación y con estas aumentó la potestad para que el usuario ponga precio, porque hasta hace nueve años, el precio del servicio lo ponía el conductor. Los servicios en calle han disminuido', dijo Javier Figueroa, conductor de taxi hace 35 años.

Desde febrero de 2008 no se fija un aumento de las tarifas por kilómetro recorrido, señala Jorge Guerrero, taxista y miembro de un sindicato local. Esta necesidad ha sido aprovechada por las cinco compañías de base tecnología que están en el mercado en Barranquilla (ver recuadro).

La psicóloga Daniela Sierra Pereira cuenta que desde el 2015 es usuaria del servicio de las apps de transporte por la seguridad que brinda los sistemas de posicionamiento global (gps). De lunes a viernes su promedio de gastos es de $6.000 a $7.000 para ir al trabajo y para regresar a su vivienda. Dijo que comenzó con una apps que ofrecía servicios particulares con vehículos de último modelo, y ahora pasó a una que ofrece subastas de precios. 'Los trayectos son más baratos que la de los taxis'.