El dato fue dado a conocer por el Presidente Ejecutivo de la Cámara de Comercio de Barranquilla, CCB, Manuel Fernández Ariza, en la octava versión del Caribe BIZ FORUM, tras destacar la capacidad del tejido empresarial atlanticense para recuperarse luego del impacto negativo del COVID-19, y el positivo comportamiento de la producción industrial que continuó expandiéndose a buen ritmo a agosto de 2022, alcanzado un 17%, por encima del promedio nacional de 9%.
De interés: Es necesario priorizar la inversión pública
Sin embargo, se observan señales de disminución en el ritmo de crecimiento, reflejados en el comportamiento del apalancamiento financiero de las empresas y el crédito de consumo y de vivienda, ya afectados por el incremento en las tasas de interés. Se espera que el Atlántico este año tenga una tasa de crecimiento real cercana al 8,5% y para 2023 una desaceleración con un rango de crecimiento que estará entre el 1 y 2%.
En este contexto Fernández Ariza resaltó el papel fundamental del empresariado, y la manera como la inclusión productiva y la movilidad empresarial, a través de generación de empleos formales, son determinantes para reactivar el crecimiento y reducir la pobreza en el país y en los territorios más rezagados.