El 75% de los países latinoamericanos utilizan la factura electrónica. El 35% lo hace de manera obligatoria, el 40% voluntaria y el 25% no la usa, según el estudio sobre el Uso de la Factura Electrónica en América, elaborado por Seres, líder global en el intercambio electrónico de documentos.
El sistema comenzó a utilizarse en la región en la década de los 90 del siglo pasado y su uso se aceleró exponencialmente el nuevo siglo.
El primer modelo de factura electrónica se desarrolló en Chile en 2003, con el objetivo de incrementar la competitividad y eficiencia del mercado, mejorar el cumplimiento de las obligaciones fiscales, los procesos administrativos y el control tributario.
Argentina fue pionera en obligar su uso en 2007 y le siguieron Brasil (2008), México (2011), estos dos últimos países son, a día de hoy, líderes en el uso de la e-factura en América Latina.