Promigas obtuvo una nueva concesión en Perú con la que duplicará su operación en este país, donde atiende los servicios de transporte, distribución y comercialización de gas natural en la región norte.
Las inversiones proyectadas en Perú con la nueva concesión, de acuerdo con lo explicado por el presidente de Promigas, Eric Flesch, están en el orden de los USD230 millones.
Estos recursos serán ejecutados por la compañía filial de Promigas, Gasnorp, para cumplir con el compromiso de conectar 64 mil viviendas al servicio de gas, beneficiando a unos 260 mil habitantes.
Además, el contrato de concesión contempla la construcción de una red principal de acero de 270 kilómetros con capacidad de transporte de 40 millones de pies cúbicos diarios (mpcd).
Flesch explicó que la nueva infraestructura conectará a todos los productores de la región con usuarios residenciales, comerciales, vehículos e industrias en Piura.
La operación de Promigas en Perú que comenzó desde hace 11 años, también incluye otras dos compañías, una de ellas es Calidda, donde tiene una participación del 40% y es socio del Grupo de Energía de Bogotá (GEB), para distribuir gas natural en Lima y Callao, donde conecta a más de 800 mil hogares, es decir, unos 3,5 millones de personas.
La segunda empresa es Quavii, con la que trabaja en un proyecto para conectar al servicio de gas natural a más de 150 mil familias en siete ciudades del norte de Perú. En los primeros 20 meses desde la puesta en operación comercial ya ha realizado 53 mil conexiones.
Con esta filial, que presta el servicio de distribución y comercialización de gas en cuatro regiones del norte peruano, las inversiones llegan a los USD112 millones.
'Promigas tiene el sello del gas en el Péru, somos líderes', señaló el ejecutivo.
El presidente de Perú, Martín Vizcarra, anunció el pasado domingo la entrega de la concesión para la distribución de gas en la región de Piura a la compañía barranquillera.
En Perú, Promigas cuenta con 900 mil usuarios y tiene el potencial para llegar a 3,6 millones de usuarios.
'Esta es una gran noticia para Perú, pero también para los colombianos que debemos sentirnos orgullosos', sostuvo Flesch.
De otro lado, el empresario destacó que con la ampliación de la capacidad de transporte en 100 mpcd con el gasoducto que llevará el combustible que sale de los campos del sur de Córdoba y Sucre hasta Cartagena y
Barranquilla, estos centros urbanos tendrán garantizada la disponibilidad del gas, ante la declinación de los campos de La Guajira.
Con la entrada en operación del gasoducto Jobo-Majaguas-Cartagena-Barranquilla, la Costa Caribe tendrá una capacidad adicional de transporte del 30%. La inversión total es de USD200 millones.
El presidente de Promigas recordó que la primera etapa del gasoducto entra en operación este 1 de agosto y la segunda, que llega hasta Barranquilla estará lista a finales de noviembre de este año.
Gasoducto subfluvial más largo
El gasoducto subfluvial más largo de América latina fue construido por Promigas en el Canal del Dique con una extensión de 3.400 metros.
La obra que comenzó a construirse en enero de este año hace parte del gasoducto que va de Jobo a Cartagena que está listo para entrar en operación.
Su extensión es unas 30 canchas de fútbol y su planeación tomó dos años. La tubería se encuentra ubicada a 110 metros debajo del lecho del Canal del Dique. La inversión fue de $72 mil millones. El presidente de la compañía, Eric Flesch, explicó que con esta obra Cartagena y Barranquilla quedan conectadas con los campos de gas del sur de Sucre y Córdoba.
Actualmente existen tuberías que van por arriba del canal del dique, pero por requerimientos ambientales se hizo el cruce subfluvial que tiene un 'impacto mínimo' en la zona. El cruce subfluvial parte de la población de Correa hasta Marialabaja en Bolívar.
