Los atlanticenses tienen la oportunidad de disfrutar de un nuevo puente festivo cargado de festivales culturales y gastronómicos que permiten descubrir los sabores y la esencia de los distintos rincones del departamento.

Es temporada de vacaciones, los más pequeños están en casa y es esta la ocasión perfecta para brindarles un fin de semana diferente y lo más importante en familia, con actividades que los acercarán a descubrir la magia de nuestros territorios y de probar a qué sabe el Atlántico.

La agenda cultural incluye planes que inician por Barranquilla y que se extenderán por lo largo y ancho de la geografía departamental. El ‘Carnaval de Verano, Río y Mar’, que comenzó este viernes en el Gran Malecón del Río, con la puesta en escena de 10 estaciones patrimoniales, este sábado se traslada a la Plaza de la Paz, donde se cumplirá un concierto a las 6:30 de la tarde. Mañana será el gran cierre en la plaza central de Puerto Colombia, a partir de las 4:30 de la tarde, con las estaciones patrimoniales que tendrán como final una gran rueda de cumbia.

Esta propuesta liderada por la Alcaldía de Barranquilla busca extender el Carnaval durante 365 días, es por ello que con la integración de los distintos operadores de la fiesta ofrecen esta propuesta a mitad de año para que propios y foráneos disfruten de esta iniciativa en su segunda edición. Tal como lo afirma el secretario de Cultura del Distrito, Juan Ospino, se trata de un evento de relevancia para la ciudad porque en esta temporada vacacional se requiere una variada y amplia oferta cultural, con mayores espacios para quien llegue de visita, y aun para quien vive en esta capital. En el centro del departamento, justo en el corregimiento de Pital de Megua, jurisdicción de Baranoa, se cumple la edición 32 del Festival del Pastel, en el que las matronas de este envuelto mágico esperan que las ventas lleguen a 20.000 unidades. Esta meta mejoraría los ingresos económicos de estas familias que se dedican a sacar lo mejor de sus fogones todo el año y a comercializarlo en el Parador del Pastel, ubicado en la entrada del corregimiento en la Cordialidad o también en sus casas.

Avanzando un poco más por la zona céntrica del departamento las personas se toparán con la segunda edición del Festival Frutos del Campo que se cumple en el corregimiento de Guaimaral, Tubará. Bajo el lema “por el rescate de raíces y tradiciones campesinas”, se ofrecerán muestras gastronómicas basadas principalmente en sancochos tradicionales, pescado, pasteles, empanadas, arroces, coladas, bollos, enyucados y bebidas de frutas. Las muestras artesanales, especialmente productos hechos en madera, bejuco y crochet, serán ofrecidos al público.

La ruta gastronómica de este fin de semana continúa en Luruaco para rendir honores a uno de los productos insignia de la cultura caribe, la arepa de huevo, que será ofrecida acompañada de distintas proteínas, algunas tan novedosas como la lengua de vaca. Aprovechando incluso el desarrollo de la Copa América, las matronas de este municipio diseñaron una arepa con la forma del trofeo de talla continental. Son alrededor de 20.000 visitantes los que se esperan por estos días en esta verdadera fiesta culinaria.

Y en el sur del departamento, Suan vibrará con la edición 32 del Festival Nacional e Internacional de las Artes. Este año rinde homenaje al maestro Natalio Antonio Pacheco Fonseca, una memoria viviente del Son de Pajarito y quien a través de sus composiciones, cantos y bailes ha contribuido a la salvaguarda de esta manifestación.

Lo bueno es que la oferta festivalera continuará durante este segundo semestre del año con propuestas como el Festival del Bollo en Ponedera, el de la guayaba en Palmar de Varela, el de la butifarra en Soledad o el del chicharrón en Baranoa. La agenda disponible en este ‘puente’ festivo es una oportunidad inmejorable para visitar nuestros municipios y contribuir al fortalecimiento del turismo interno y, por supuesto, contribuir a dinamizar la economía y apoyar a las 660 familias que viven de los festivales que se desarrollan a lo largo del año, especialmente los gastronómicos, que permiten a sus visitantes un verdadero intercambio cultural. ¡A recorrer el Atlántico en familia y disfrutar de sus atractivos, su gastronomía y su gente!