Dos horas antes de que iniciara el conversatorio del actor Vincent Cassel, en el patio del Centro de Formación de la Cooperación Española, ya había una fila de más de 200 personas que querían hacer parte de este encuentro entre el francés y el director de actores Juan Pablo Felix, en el marco del Festival Internacional de Cine de Cartagena.
En tono jocoso, y combinando sus respuestas entre español, inglés y francés, Cassel hizo un recorrido por algunos momentos claves en su carrera, y lo que representa para él encarar un personaje cada vez que le dice sí a un proyecto .
Reconocido como unos de los actores europeos más destacados de las últimas décadas, Cassel ha interpretado una larga lista de personajes de gran complejidad expresiva y psicológica. Sus papeles en reconocidas historias como El odio, Irreversible, Read my Lips, Instinto de muerte y El cisne negro, entre otros, lo han hecho uno de los actores más aplaudidos por la crítica cinematográfica.
Ahora, radicado en Brasil, y con licencia para tomarse el tiempo de escoger las películas donde quiere actuar, Cassel revela que hace más de 30 años, cuando inició su carrera, se preocupaba mucho por estudiar sobre técnicas y el mundo del cine, pero que rápidamente entendió que 'a veces simplemente hay que dejarse llevar y estar listo para que todo pase. Un accidente en un set, puedo ser lo mejor, puede ser lo que inspire un gran momento frente a la cámara'.
También reconoció que cuando era joven no se podía reconocer en el cine francés, por lo que se despertó en él una fascinación por el cine italiano y las narrativas sobre antihéroes.
'Yo no creo en los héroes. En el cine creo que los malos representan mucho mejor la vida real que los buenos', afirmó.
Sus técnicas de actuación fueron motivo de recurrentes preguntas cuando el público tuvo la palabra, aunque el actor dejó claro que trata de evitar cualquier técnica y que hasta ha dejado de ver cine en los últimos años.
'Creo que las películas que te impactan son las que ves cuando eres joven. Yo no tengo ninguna metodología a la hora de interpretar un personaje, la verdad ni siquiera sé si lo que estamos haciendo es arte en realidad. Para mí actuar es jugar con lo que uno es y con lo que a uno le gustaría ser, sin juzgarse', detalló.
Sin embargo, el exesposo de la también actriz Mónica Belluci confesó que su momento ideal para construir personajes es justo antes de dormirse y cuando se acaba de despertar.
'Yo diseño mis personajes, los dibujo. En esos momentos de medio sueño –puede sonar loco– pero se me viene una imagen de cómo se puede ver el personaje, y esa es la que trato dejar en la película', relató el afamado actor de 50 años, durante el conversatorio que se extendió por una hora, y en el que también recibió más de una oferta laboral de jóvenes cineastas colombianos interesados en incluirlo en el reparto de sus producciones.
Ante la lluvia de propuestas, Cassel los remitió a contactarlo por Facebook e Instagram, y dijo que siempre está abierto a grabar en cualquier lugar del mundo.
Cassel también recibió un homenaje por su trabajo en el Teatro Adolfo Mejía, en el que se le fue entregado el máximo galardón otorgado por el Ficci: el premio India Catalina.
Durante su paso por el festival, fueron proyectadas algunas de sus películas, incluida Solo el fin del mundo, del canadiense Xabier Dolan, cuyo trabajo allí describió como una 'experiencia fantástica'.
'Fue fantástico, rodamos en ocho días. Todo estaba listo, solo teníamos que decir nuestros parlamentos y ya. Cuando nos dimos cuenta ya estaba terminada y hasta habíamos ganado un premio', contó.
El Festival Internacional de Cine de Cartagena se clausura esta noche, después de cinco días de conferencias, homenajes y, por supuesto, un gran banquetes de películas.
