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El ícono de la música latina, el recién fallecido Johnny Ventura, estableció un vínculo muy estrecho con Colombia.

Este dominicano reconocido como El Caballo Mayor, acrecentó su popularidad al versionar varias canciones que escuchaba en sus constantes actuaciones en el Carnaval de Barranquilla, temas que incluía en su repertorio para concursar en el Festival de Orquestas, certamen en el que alcanzó cuatro Congos de Oro.

Tras palpar la positiva respuesta del público, posteriormente se animaba a grabarlas.

Con su portentosa voz internacionalizó temas como Patacón Pisao’, del chocoano Ramón Chaverra; Matilde Lina, del guajiro Leandro Díaz, o La hamaca grande, del bolivarense Adolfo Pacheco, solo por mencionar tres de nuestras joyas.

Uno de los artistas costeños a los que más canciones le grabó fue al atlanticense Gabriel ‘Rumba’ Romero.

En diálogo con EL HERALDO desde Miami, EE. UU., El Cumbiambero Mayor entregó detalles de sus lazos de amistad.

El artista oriundo de Sabanagrande, Atlántico, contó que le entregó tres temas: El hombre enamorao’, Allá se quedó y Mi sueño amado. 'El primer tema fue El hombre enamorao’ (1986), esa canción la hizo con mucho gusto y garbo, como solo él podía hacerlo. Luego en 2003 me encontré con él en Miami, le hablé de un tema que se llama Allá se quedó, le gustó y a los dos días ya estaba poniéndole su voz en estudio, y cuando estaba lista la escuchó el cubano Willy Chirino, y nos pidió que lo dejáramos participar. Le concedimos ese deseo y la hicieron a dúo'.

El cantautor de 77 años sostiene que ese tema les trajo suerte a ambos artistas, debido a que en 2004 el dominicano ganó el Grammy Latino en la categoría Mejor Álbum de Merengue con la producción Sin desperdicio, que incluye Allá se quedó. Ese mismo año Willy Chirino obtuvo el Grammy anglosajón en la división Mejor Álbum de Salsa-Merengue con Son del alma, disco que incluyó su tema como un bonus track.

'Fui su amigo entrañable, cuando iba a Santo Domingo era obligatorio vernos, y él hacía lo propio cuando venía a Miami. Nuestra última conversación fue el 22 de mayo, fecha de Santa Rita de Casia, mi patrona. Me contó que su madre también fue fiel seguidora de esta virgen. Estaba muy optimista, el año pasado había superado el coronavirus y tenía ganas de retornar a los escenarios, me dijo que extrañaba mucho el calor de su público, especialmente el de Colombia'.