La mandarina es una de las frutas más apetecidas por su sabor entre dulce y ácido, pero además por todas sus vitaminas y aporte nutricional al cuerpo humano. Sin embargo, no solo su pulpa es beneficiosa sino también la cáscara.
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Recientes estudios realizados por científicos indican que las cáscaras de mandarina pueden contribuir a la reducción de indicadores de la salud.
Investigadores de la Unidad de Análisis de Alimentos de la Facultad de Farmacia de la Universidad Central de Venezuela revelaron que esta cáscara contribuye a bajar los triglicéridos.
Según la información publicada por Archivos Latinoamericanos de Nutrición, los expertos señalaron que la piel de esta fruta cítrica tiene mayor concentración de polifenoles, un compuesto químico con gran poder antioxidante.
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Además, el estudio indica que los nutrientes de esta cáscara combaten directamente el envejecimiento y puede prevenir enfermedades neurodegenerativas.
También señala que la cáscara contiene más calcio que la propia pulpa de la mandarina, contiene alta presencia de magnesio y un aporte importante de vitamina C.
Por su parte, Medical News Today explica que el consumo de la cáscara disminuye la absorción de grasas y azúcar en el intestino delgado.
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¿De qué manera se puede consumir la cáscara de mandarina?
Ingredientes
- 2 mandarinas.
- 1 litro de agua.
- Miel, stevia u otro endulzante natural
Preparación
Tome las mandarinas y lávelas muy bien, para luego pelarlas.
Tenga en cuenta que no deben tener la parte blanca, ya que es muy amarga.
Luego ponga a hervir el litro de agua
Seguidamente, agregue las cáscaras al agua y deje hervir por 10 minutos.
Ahora apague el fuego y deje reposar por cinco minutos.
Por último, cuele la infusión y agregue su endulzante natural.
Se recomienda tomar dos tazas al día, especialmente después de las comidas principales.