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La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es la contribución al desarrollo humano sostenible, a través del compromiso y la confianza de la empresa hacia sus empleados y las familias de éstos, hacia la sociedad en general y hacia la comunidad local, en pos de mejorar el capital social y la calidad de vida de toda la comunidad.

El objetivo principal de la responsabilidad social empresarial es que el impacto positivo que causan estas prácticas en la sociedad se traduzca en una mayor competitividad y sostenibilidad para las empresas. Así, ser responsable socialmente generará automáticamente más productividad, puesto que una mejora en las condiciones para los trabajadores optimizará también su eficacia.

Camilo Mejía, docente, investigador, experto en el tema de Responsabilidad Social Empresarial de la  Universidad del Norte, afirma que la responsabilidad social es importante por tres razones fundamentales:
La primera razón, 'en los procesos de internacionalización que ha venido trabajando Colombia hace muchos años con los Tratados de Libre Comercio, la responsabilidad social es una herramienta que te permite acceder a esos mercados internacionales porque son mercados que consideran estos temas de responsabilidad Social valiosos y por lo tanto están dispuestos a comprarlos en vez de comprarle a la competencia, o incluso pagar valores premium por ese tipo de productos o servicios que involucren ideas prácticas o comportamientos  de responsabilidad social'.

La segunda razón, para Mejía básicamente, es porque se convierte en una fuerte ventaja competitiva, al poder diferenciar a partir de prácticas de responsabilidad social, por ejemplo, vendiendo un producto orgánico, o generando prácticas de comercio justo, o disminuyendo el impacto en el medio ambiente con un empaque más amigable desde el punto de vista ambiental. 'Me puedo diferenciar con respecto a la competencia y por eso la compañía cliente mía o el cliente final está dispuesto a comprarme a mí y no a la competencia o la marca  competencia o incluso podría cobrar un valor premium por algunas de las actividades, donde la idea es que el productor reciba más dinero y no se quede el dinero en  manos de los intermediarios'.

Y la tercera razón importante, según Mejía, es porque la Responsabilidad Social se convierte en una herramienta de gestión del riesgo. Todas las organizaciones tienen riesgos operativos  al  tener prácticas de responsabilidad social, esto permite minimizar esos riesgos, por ejemplo, verificando  y eliminando riesgos de trabajo infantil en la cadena de proveeduría, o por ejemplo, en el tema de desarrollo de proveedores, donde tenga claro cómo están trabajando por ejemplo, en servicios de seguridad privada, que se le hagan exámenes psicológicos recurrentes a todos los miembros de la vigilancia privada que están en operación, que los que tengan algún problema emocional depresivo los pueda manejar a través de procesos psicosociales de acompañamiento o los mueva o los mande de vacaciones.

 'También puedo minimizar riesgos teniendo todos los indicadores de práctica de responsabilidad social que me permitan frente a la queja de una comunidad vecina mostrar esos indicadores y esas actividades, o vinculando proveedores locales para evitar ese probable problema de licencia social para operar que me pueda generar una comunidad vecina', señala.

En la mitad de todo eso genero buena reputación, buena imagen, atraigo más clientes, atraigo un mejor talento o retengo el talento que tengo en  mi organización, puntualiza Mejía.