La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) confirmó las sospechas existentes sobre el caso de corrupción durante las elecciones presidenciales de Honduras el pasado domingo.
El exjuez español Baltasar Garzón fue el encargado de emprender las investigaciones y la misión de recaudar declaraciones de testigos para constatar la hipótesis.
Garzón, integrante de una de las delegaciones de la FIDH, aseguró que hubo compra de credenciales, de votos y de otros tipos de fraudes que constan en los documentos entregados por los encargados de la misión a la organización.
Este mismo hombre, a quien se le atribuye la captura del general Augusto Pinochet en el 98, expresó su grave preocupación, al tiempo que pidió a los hondureños mantener un estado de calma y no desatar jornadas de violencia.
El fraude fue principalmente denunciado por Xiomara Castro, opositora de Juan Orlando Hernández(PN, derecha) y esposa del expresidente Manuel Zelaya.
Desde el resultado oficial entregado el pasado miércoles por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Honduras, están en marcha las impugnaciones correspondientes. A su vez, el Tribunal está constatando la compra de votos y falsificación de documentos para proceder de la mejor manera ante esta situación.