El presidente Barack Obama ordenó a su gobierno hallar mecanismos más humanitarios para manejar las deportaciones de los inmigrantes que están de manera ilegal en el país, informó la Casa Blanca.
Mientras la posibilidad de una reforma de las leyes de inmigración se ve cada día más lejana, los activistas han presionado para que Obama suspenda todas las deportaciones. Obama ha dicho que no puede tomar esa medida unilateralmente. Al anunciar que está dispuesto a cambiar cómo el gobierno hace cumplir las leyes actuales, Obama está indicando que pudiera estar inclinándose más hacia probar los límites de su autoridad ante la inacción del Congreso.
'Él le dijo a los miembros (de la bancada hispana) que le pidió al secretario de Seguridad Nacional Jeh Johnson que examine las actuales prácticas del departamento para ver cómo puede implementar las leyes de forma más humana, dentro de los confines de la ley', dijo la Casa Blanca en un comunicado.
El representante Luis Gutiérrez, legislador por un distrito mayoritariamente hispano en Illinois y quien ha criticado a Obama por hacer poco, dijo 'Está claro que los exhortos de la comunidad le llegan al presidente', dijo Gutiérrez, uno de tres demócratas que se reunieron con Obama el jueves. 'El presidente expresó claramente el dolor que siente por el efecto devastador que las deportaciones tienen en las familias'.
Obama planeaba reunirse el viernes con organizaciones que trabajan para promover la aprobación de una reforma de inmigración, dijo la Casa Blanca.
La decisión de considerar cambiar cómo el gobierno implementa las deportaciones se produce en momentos en que grupos de inmigrantes se impacientan con Obama, pese a sus esfuerzos para conseguir una legislación que asegure una vía para la naturalización de unos 11 millones de inmigrantes que viven de manera ilegal en el país.
Bajo el gobierno de Obama, casi dos millones de personas han sido deportadas de Estados Unidos.
'Para nosotros, este presidente ha sido el deportador en jefe', dijo Janet Murguía, que encabeza el Consejo Nacional La Raza,