Al menos 22 personas murieron ayer, entre ellas 20 turistas extranjeros, y una treintena resultaron heridas en el mayor atentado sufrido por Túnez desde que en 2002 una veintena de alemanes perecieron en un ataque similar en la isla de Djerba.
Entre los muertos se encuentran dos colombianos, nacidos en Bogotá –Miriam Martínez y Javier Arturo, esposa e hijo, respectivamente, del general retirado José Arturo Camelo Piñeros– dos españoles y un brasileño, que formaban parte de un grupo de turistas que realizaban un crucero por el Mediterráneo y que habían hecho escala en Túnez.
También ha sido confirmada la muerte de tres italianos. Las autoridades tunecinas informaron que entre los fallecidos también hay ciudadanos de Polonia, Alemania, Japón y Sudáfrica.
Además, dos tunecinos, un policía y una empleada de la limpieza del Museo del Bardo, murieron en la operación lanzada para poner fin al ataque.
Las autoridades informaron que dos de los cuatro asaltantes fueron abatidos.
Un crucero como regalo
Miriam Martínez, de Bogotá, tenía 56 años de edad, era odontóloga, prestaba su servicio en Sanidad Militar y estaba casada con el general (r) José Arturo Camelo Piñeros, quien es decano de la facultad de Derecho de la Universidad Militar José María Córdova.
Uno de sus hijos, Javier Arturo, de 28 años, la otra víctima, estudió finanzas en el Externado, vivía en Londres y hace una semana había obtenido su MBA en España; trabajaba con American Express, por ello José Arturo y Miriam decidieron acompañarlo en tan importante acontecimiento, además porque el general retirado había cumplido años el 10 de este mes y para celebrar por partida doble la familia programó un crucero por el Mediterráneo.
'Partieron hace una semana. Estaban felices, el único que no pudo ir fue Diego, de 22 años, quien estudia ingeniería en Bogotá', relata Lourdes Insignares, exdiputada del Atlántico y expersonera del Distrito de Barranquilla, casada con el coronel Néstor Camelo, hermano de José Arturo, cuñado de Miriam y tío de Javier Arturo.
'Era una pareja feliz por sus logros personales y por el lindo hogar que tenían desde hace 30 años', sostiene la abogada Insignares Castilla.
Miriam y José Arturo se conocieron en el Ejército, cuando ella era teniente y odontóloga.
Se salvó porque fue al baño
El grupo de turistas arribó en horas de la mañana de ayer al Parlamento tunecino, el cual internamente está conectado con el Museo del Bardo.
'En el momento que el guía invita a los visitantes a seguir al Museo, José Arturo Camelo le dijo a su esposa Miriam y a su hijo Javier Arturo que siguieran, porque él iba a ir al baño. Segundos después cuatro hombres armados entraron al Museo con un grupo de rehenes, lo que inició la balacera entre los terroristas y las autoridades. Cuando él sale se encontró con varias personas baleadas, entre ellos sus familiares', sostuvo con la voz entrecortada Lourdes Insignares, según lo que le manifestó su cuñado desde Túnez .
José Arturo Camelo Piñeros pidió la colaboración a la Cancillería para el traslado de los cuerpos de su esposa e hijo a Colombia. Él es abogado, especializado en Derecho Penal, con maestría en Derechos Humanos, director de Justicia Penal Militar y fue director del Hospital Militar.
Repudio e indignación
La comunidad internacional reaccionó con horror e indignación por este ataque terrorista. El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, condenó de la manera 'más contundente posible' el ataque y extendió sus 'sentidas condolencias' a las familias de las víctimas.
Además, el jefe de la diplomacia estadounidense aplaudió la 'rápida respuesta' de las autoridades ante el atentado, que calificó de 'violencia gratuita', y 'sus esfuerzos para resolver la toma de rehenes y restaurar la calma'.
El rey de España Felipe VI envió un telegrama al presidente tunecino, Béyi Caïd Essebsi, en el que condena 'con toda firmeza' el 'execrable y cobarde' ataque terrorista y reafirma el 'firme compromiso' de España para 'seguir colaborando estrechamente' con Túnez en favor de la paz, la convivencia y la prosperidad.
También el jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, contactó telefónicamente con Essebsi para expresarle sus condolencias. Esta llamada se sumó a la condena del Gobierno al 'cobarde' atentado terrorista que 'España ha recibido con horror e indignación', según un comunicado difundido por el Ministerio de Exteriores.
Solidaridad de la cancillería
El Ministerio de Relaciones Exteriores, en nombre del Gobierno de Colombia, expresa sus más sentidas condolencias a los familiares y amigos de los dos colombianos que perdieron la vida en las últimas horas en Túnez en un ataque terrorista registrado en inmediaciones del Museo del Bardo. Las víctimas son una madre y su hijo, quienes se encontraban junto con su esposo (y padre), de turismo en ese país. Desde el momento en que la Cancillería conoció esta noticia estableció contacto directo con el colombiano sobreviviente. A través de la Dirección de Asuntos Consulares del Ministerio, y de los representantes de nuestras embajadas en Argelia y España, la Cancillería ha estado en permanente contacto con el sobreviviente y con sus familiares brindando la asistencia que requieran.
En las próximas horas funcionarios de la Embajada de Colombia en Argelia, cuya sección consular tiene la circunscripción para Túnez, viajarán a dicho país para encargarse del proceso de repatriación de los cuerpos de las víctimas.