Una inédita Cumbre de las Américas se inauguró anoche con llamados coincidentes de acudir al diálogo para resolver diferencias, a buscar la paz y a solucionar conflictos en el hemisferio, en una ceremonia en que Cuba está presente por primera vez.
Al abrir el foro de mandatarios, el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, dijo que 'el gran reto que tendremos en estos días, es dejando las diferencias coyunturales a un lado, buscar los puntos de convergencia que nos permitan luchar unidos contra la desigualdad, la falta de oportunidades y la delincuencia, para así dejarle a las futuras generaciones una América unida, segura y próspera'.
También destacó los diálogos de paz que el gobierno de Colombia realiza con la guerrilla de las Farc y dijo que era un modelo de paz para la región.
En el mismo sentido se expresó el secretario de la ONU, Ban Ki-Moon, con quien coincidió el secretario saliente de la OEA, José Miguel Insulza.
El saludo esperado
Esta cumbre marca la primera participación de Cuba y la precede un fuerte interés en lo que haga el líder de la isla comunista Raúl Castro y el presidente Barack Obama, meses después del anuncio histórico de restablecer relaciones entre los dos países tras medio siglo de desavenencia, un hecho que se celebró en la apertura.
Obama y Castro se saludaron y estrecharon la mano en la inauguración, un momento que fue capturado en video por Telesur, la cadena estatal de televisión venezolana.
Varela pregonó en su discurso que la cita marca el 'inicio de una nueva etapa en las relaciones del hemisferio basado en el respeto de los diferentes sistemas de gobierno'.
Más temprano, la Casa Blanca informó que el presidente Obama y Castro 'se verán' hoy, aunque al momento, no hay planeada una reunión oficial a una hora específica entre los mandatarios, dijo Ben Rhodes, asesor adjunto de seguridad nacional de Obama.
Pero Rhodes afirmó que las autoridades sí anticipan que los dos mandatarios tendrán la oportunidad de 'verse' y hablarán hoy, el segundo y último día de la Cumbre de las Américas.
Los reflectores también se enfocarán en el mandatario venezolano Nicolás Maduro, quien llegó a Panamá en medio de un recrudecimiento de las tensiones con Estados Unidos, después de que el gobierno de Obama decretase sanciones y declarara a la nación petrolera una amenaza para la seguridad estadounidense. El líder venezolano ha anticipado que entregará a su par norteamericano una lista con millones de firmas de compatriotas que piden el cese de esa medida, cuestionada por otros gobiernos en la región. AP